La compra de un auto usado obliga al consumidor a revisar minuciosamente las características del vehículo que desea adquirir. Entre los datos más importantes acerca del automóvil están la marca, el modelo, el número de identificación vehicular y de motor, y sin lugar a dudas: el total de kilómetros recorridos. Pero como alterar ese indicador es una práctica común, vamos a compartirte un truco que puede servirte.
Tener en cuenta el número de kilómetros recorridos de un auto usado ayudará al interesado a determinar las condiciones mecánicas generales en las que se encuentra el vehículo .
Y es que a partir del número de kilómetros se pueden inferir datos acerca del pasado del vehículo , como el número de dueños anteriores, los servicios de mantenimiento previos a los que se ha sometido, así como el reemplazo de algunos componentes mecánicos.
Entre más kilómetros recorridos e intervenciones preventivas, correctivas y de largo aliento tenga registradas, el valor de los automóviles disminuye, por lo que muchos vendedores recurren a tretas para modificar el kilometraje mostrado en el tablero.
Para evitar ser víctima del engaño y pagar más de un precio justo, existen varios trucos para saber los kilómetros reales recorridos de un auto usado.
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Registros de mantenimiento
Además de la factura original del automóvil , el comprobante de últimas tenencias y la tarjeta de circulación vigente, es importante que el vendedor entregue al comprador un registro de mantenimiento que adjunte datos de inspecciones técnicas a las que se ha sometido el vehículo de segunda mano.
El interesado en adquirir un vehículo usado tiene el derecho de solicitar al ofertante una serie de comprobantes y documentación asociada al historial de mantenimiento del automóvil para concretar la transacción. Normalmente en estos registros se coloca el dato de kilómetros exactos recorridos por el vehículo al momento de ser sometido a servicio, permitiendo establecer una lectura coherente del promedio anual del kilometraje .
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Los registros pueden ser avalados por compañías de seguros, talleres mecánicos o la misma agencia, y te ayudarán a conocer tanto el número de servicios de mantenimiento , como los daños por accidentes y desgaste a los que ha sometido el auto . De esta manera tendrás una idea del estado mecánico del vehículo que deseas adquirir.
Asimismo, entre las inspecciones que puedes realizar tú mismo están el poner atención al odómetro , en especial si no es digital ya que, si fue alterado, es posible que notes, sobre todo en el primer dígito de la izquierda, un desnivel en comparación con el resto de las cifras, de acuerdo con la Guía Automotriz de Costa Rica. En ese mismo sentido también busca indicios de que el tablero fue desmontado ya que dicha acción sería necesaria para intervenir esta pieza.
Si el auto tiene un odómetro digital , malas noticias, podrías pensar que este es mucho más difícil de violar pero lo cierto es que existen dispositivos para alterar los números de una manera muy sencilla, así que es mejor hacer tus propios cálculos.
Si bien todo depende de los hábitos de manejo toma en cuenta que, de acuerdo con las automotrices, un auto recorre en promedio 50 kilómetros al día, eso significa entre 15 mil y 20 mil kilómetros al año. Si el número es sospechosamente bajo según el año, desconfía.
También puedes revisar los mantenimientos que ha recibido el auto , es decir, si en un año se hicieron 3 servicios porque llegó a los 30 mil kilómetros hay que sospechar si el año siguiente solo registró 10 mil más.
Consulta a tu mecánico
Otra manera eficaz de conocer el kilometraje exacto de un auto es por medio de un escaneo hecho en una máquina de diagnosis. Estas se encuentran en centros mecánicos especializados y basta con conectar el automóvil a un puerto OBD2 para que la máquina arroje en pantalla el dato deseado.
También en talleres especializados pueden realizar una revisión a fondo del vehículo para determinar los antecedentes mecánicos del auto , tales como el estado de los discos de frenos, el número de reemplazos en componentes en dirección, caja de cambios, etc.
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Una revisión mecánica a fondo hecha por un experto te ayudará a conocer el estado de las piezas del automóvil . Muchos de los componentes mecánicos de los autos tienen una vida útil prolongada. Encontrarte con piezas nuevas podría ser un indicador de que el kilometraje del automóvil es elevado, por lo que se requirió un reemplazo de las piezas.
Y no solo revises las piezas mecánicas, el desgaste en asientos, pedales y volante puede ser un buen indicio para saber si los kilómetros que muestra el tablero son los reales.
Recuerda que al momento de adquirir un automóvil usado tienes derecho como consumidor a desistir de la operación si encuentras modificaciones en el kilometraje u otro elemento estipulado en el contrato de adhesión, según las reglas de la Profeco.
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