Además de gasolina, una parte vital de cualquier auto es el aire en las llantas. Como todos sabemos, este gas es el que infla los neumáticos y permite un manejo fluido en todo momento. Pero con el uso, cambios de clima y paso del tiempo, es normal que se pierda la presión de las llantas.
Para saber si les hace falta aire a tus neumáticos, hay dos grandes cuestiones: si tu auto cuenta o no con el monitoreo de presión de llantas. Te compartimos algunas maneras de saber si tus llantas requieren ser infladas.
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En el primer caso, para aquellos autos que no presentan el sistema de monitoreo de presión, obliga a estar más atentos a comportamientos que se presentan al manejar. Por ejemplo:
Por el contrario, en los autos con el sistema previamente mencionado, es más sencillo notar cuando hay que revisar la presión, pues un testigo se encenderá en el tablero. Incluso, algunos autos mencionan específicamente cuál es la llanta baja y qué presión tiene.
Este testigo es de color amarillo, y simula una llanta ponchada con un signo de exclamación al centro. Al momento de inflar la llanta y rodar, los sensores correspondientes harán la lectura de la presión y automáticamente se apagará.
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Esto es un dato muy variable según la cantidad de personas que lleves a bordo, el tipo de auto y tamaño de llanta. En promedio, las llantas se inflan entre los 30 y 40 PSI, pero la cifra exacta la puedes conocer en tu manual de propietario o en las etiquetas ubicadas al marco de la puerta del conductor o tapa del depósito de gasolina.
Recuerda revisar la presión de aire de tus llantas al menos cada 15 días y antes de salir a carretera. Esto mejorará el desempeño de tu auto, su eficiencia y alargará la vida útil de los neumáticos al generar un desgaste uniforme.