Es bien sabido que existen estaciones de servicio que sirven menos gasolina de la que paga el cliente. Desgraciadamente también hay las que proveen combustible adulterado. Es por ello que en Autopistas te decimos cómo saber cuándo esto sucede para que cuides el tiempo de vida de tu automóvil y tu bolsillo.
Primero, hay que tener claro que la gasolina adulterada es la mezcla del combustible original, combinada con otros líquidos, como lubricantes, disolventes y hasta agua. También puede contener residuos de otros materiales que afectan el nivel de pureza del líquido.
Las consecuencias de cargar gasolina adulterada, además, de desperdiciar tu dinero, incluyen graves daños en tu automóvil , por ejemplo:
1. Pérdida de potencia al momento de acelerar el motor. Como esta mezcla contiene otros líquidos que no corresponden con la función que cumple la gasolina en el proceso de combustión, se desencadena un comportamiento errático que puede percibirse durante la marcha.
2. Tirones. Debido a la falla en el motor se presentan problemas en la aceleración.
3. Aumento en el consumo de gasolina . Si notas que tu auto consume más combustible del habitual, algo anda mal.
4. Luz de la alerta del motor encendida. Indica que hay algún problema con el sistema de inyección electrónica y, una de las causas más probables es la gasolina adulterada , ya que ese es el sistema que controla la admisión de combustible y calcula el porcentaje de mezcla con el aire. Si los números no están dentro de los parámetros, hay algún problema.
5. Ruidos anormales. Cuando aceleras o necesitas más esfuerzo se escucha un ruido, parecido al de una cadena de bicicleta.
6. Se detiene el motor. Como el proceso de combustión no se realiza correctamente el motor puede dejar de funcionar repentinamente.
Foto: Pixabay
He aquí la importancia de saber los daños que ocasiona la gasolina adulterada , ya que a la larga el tiempo de vida de tu motor se reduce. Asimismo, esto podría confundirse con otros problemas, lo que se traduce en varias visitas al taller mecánico.
1. Presenta una queja a la gasolinera .
2. Pide un peritaje para tu auto a una empresa especializada para que analice si los síntomas los está provocando la gasolina adulterada .
3. También solicita un análisis del combustible de la gasolinera . Puedes pedirlo a la misma empresa de peritaje o a la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco).
4. Con el informe completo de la empresa, puedes poner una denuncia.
5. Lleva tu coche a un taller para hacer un lavado profundo del motor y del tanque de gasolina para que no queden residuos.
6. Sigue las recomendaciones del fabricante sobre el tipo de combustible que necesita tu auto .
Y, recuerda, trata de cargar gasolina en la misma estación, para que de esta manera puedas identificar el combustible de calidad. Además, debes estar atento sobre los síntomas de tu coche que te comentamos anteriormente y los kilómetros que recorrió tu vehículo . Esto te ahorrará dinero, tiempo y futuros daños.
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