Los coches autónomos todavía tienen algunos problemas para dominar lo básico cuando se ponen a prueba, aparentemente. El equipo de Roborace SIT Acronis Autonomous es el claro ejemplo de esto, pues en la primera ronda de la carrera de la Temporada Beta 1.1 su auto sin conductor se estrelló directamente contra una pared.
No se sabe con certeza qué provocó el percance, pero las condiciones de la pista claramente no fueron las culpables, pues el auto había tomado una curva suave y no estaba compitiendo contra otros al mismo tiempo.
Tampoco fue el único automóvil que sufrió un problema. El vehículo del equipo Autonomous Racing Graz tenía problemas de posicionamiento que lo hicieron perderse en la pista y pausar la carrera.
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Para algunas personas resulta divertido ver este tipo de percances, pero esto también ilustra los desafíos que aún quedan por resolverse en cuanto a las competencias de vehículos autónomos. A diferencia de los autos sin conductor fabricados para las calles, los corredores tienen que navegar de forma rutinaria a altas velocidades donde hay menos tiempo para tomar decisiones y reaccionar ante los peligros.
Sin embargo, eso es lo que la iniciativa de Roborace está tratando de abordar: los equipos idealmente aprenden de problemas como este y mejoran su tecnología hasta el punto en que pueden correr adecuadamente sin tener que estar al pendiente de ellos todo el tiempo.
En el video se puede ver al auto de competencias autónomo confundir el camino, para luego tomar una vuelta brusca a la derecha, impactando todo el frente del vehículo contra la barda de contención. Por obvias razones, nadie salió lastimado, pero Roborace deberá de reparar la unidad e investigar cuál fue el problema para seguir en las futuras competencias.