Las pruebas de choque son un requisito por el que todos los autos nuevos pasan en regiones como Europa, Japón o Norteamérica. En Latinoamérica es relativamente reciente, sin embargo, cobra mucha importancia pues varios de los autos que se venden en nuestro país se importan de América del Sur.
A pesar de ello, el “Insurance Institute For Highway Safety” (IIHS) es el organismo encargado de realizar pruebas de impacto en Estados Unidos y, recientemente, actualizó los criterios para evaluar los choques laterales. Estos son los videos que explican las calificaciones para sedanes y para SUVs.
Esto trae como conclusión que los resultados tuvieron cambios importantes, natural debido al crecimiento que todos los vehículos han tenido en los últimos años. Principalmente, los SUV y otras categorías de camionetas son las que representan mayor riesgo para conductores puesto que su tamaño está justo a la altura de la cabeza y tórax.
Las pruebas del IIHS muestran que estos son los modelos con menor seguridad:
La calificación de “Pobre” corresponde a la prueba de impacto lateral, donde el dummy muestra que cabeza, cuello, torso y pelvis para conductor mientras que para el pasajero trasero, el torso y pelvis son las partes con mayor afección.
Este sedán japonés obtuvo la calificación general de "Pobre" al combinar notas pobres y marginales para el impacto lateral en el caso del conductor, desde la cabeza hasta la pelvis. Esto ocasionó que la cabeza del dummy impactara con la puerta al momento del choque. Sin embargo, el ocupante trasero obtuvo una buena calificación.
Esta camioneta es de las pocas que cuentan con paneles removibles de la carrocería y esto sacrifica las bolsas de aire de cortina. A pesar de ello, la calificación otorgada al conductor en prueba de impacto lateral es buena pero cambia para el pasajero de atrás , pues la cabeza choca con el marco de la ventana. Esta combinación le otorga una calificación "Marginal" de acuerdo al IIHS.
Curiosamente, esta camioneta obtuvo una calificación “Marginal” en prueba de choque lateral, de acuerdo al organismo. Aunque prácticamente todos los resultados son buenos, lo que causó una baja de puntaje fue el daño ocasionado a la pelvis. Para el conductor, fue evaluado como Pobre y para el pasajero de atrás , como Aceptable.
Estos resultados fueron obtenidos tras una prueba actualizada de impacto lateral, con un móvil que pesa 1,905 kilogramos a 60 km/h , parámetros que involucran 82% más energía que la prueba original. Además, los dummies usados corresponden a una fisonomía femenina por ser más pequeña y ligera que un hombre, lo que trae daños más graves en cabeza debido al contacto que pudiera haber con algunas partes del auto.
La prueba lateral suele ser más compleja que una frontal, dado que no existe tanta superficie de absorción. Claro que la estructura y barras de protección al interior de puertas ayudan, pero sigue siendo un reto diseñar zonas más rígidas en los laterales. A esto se le suma que los SUV son más altos, con lo que los choques aumentan de peligrosidad a comparación de hace una década.
Los vehículos que el IIHS nombra con estas calificaciones no son, como tal, autos poco seguros. De hecho, algunos cuentan altos nombramientos de seguridad y el equipo incluye seis o más bolsas de aire, asistencias de manejo y otros elementos enfocados en este rubro. La cuestión es que la nueva prueba de impacto lateral ahora es más exigente y por ello, esos resultados. Seguramente las próximas generaciones tendrán un enfoque diferente en cuanto a la estructura para lograr superar esta complicada prueba.