No es un deja vú. El Audi RS3 ya fue protagonista hace algunas ediciones en el momento de su lanzamiento en México. Sin embargo, tener de vuelta en el garaje de Autopistas a un invitado de tal envergadura siempre será un placer.
No solo por lo que representa un modelo con sus características: también porque ponerse al mando de un demonio de 400 hp, siempre será la dicha de cualquier petrolhead de corazón hecho y derecho.
Sin embargo, en esta ocasión no profundizáremos en sensaciones de manejo como ya lo hicimos en aquella edición, sino que nos enfocaremos en repasar lo que, a nuestro parecer, es lo más destacado que tiene el imponente y llamativo Audi RS3.
Frenos mejorados
La frenada es cortesía de los discos de acero hiperventilados con pinzas de seis pistones y rotores de 375 mm.
Ojos característicos
Los faros tienen un patrón de luces dinámico que te recibe con el nombre del modelo.
Agresividad incluso atrás
Las calaveras tienen una ligera modificación para hacerlas ver más deportivas y rudas en los caminos nocturnos.
Único en su tipo
Gracias a la estrategia de electrificación de Audi, el motor de cinco cilindros con 2.5 L está por desaparecer, con 400 caballos de fuerza. Esta es, posiblemente, la última vez que veamos este motor en un auto nuevo.
Para mantenernos en nuestro lugar
Un interior pensado para brindar la experiencia de auto deportivo gracias a los detalles y texturas.
No es cualquier cosa ponerse detrás del volante de un vehículo de estas características, especialmente cuando la industria está encaminada hacia dejar los motores de combustión a favor de la electrificación.