La delincuencia a lo largo del país ha ido en aumento en recientes meses. Las consecuencias de este efecto social no dejan de lado al robo de vehículos en escalas parciales o totales y tan solo en los primeros seis meses de 2018, en la Ciudad de México se registraron cinco mil 683 denuncias por delitos relacionados a esto.
Esto representa 50% más de los contabilizados en el mismo periodo del año anterior, según información de la Procuraduría de Justicia de la Ciudad de México.
Sin embargo, en aras de ofrecer una solución a las circunstancias en la que miles de mexicanos viven, Audi ha puesto a la venta la nueva Q5 Security , una versión desarrollada por el equipo de la marca alemana para proteger a sus ocupantes sin perder las prestaciones que un vehículo premium debe tener en términos de desempeño, equipamiento y maniobrabilidad.
De entrada, la Q5 Security se distingue de la versión “normal” por contar con un blindaje nivel VR4 en toda la carrocería , incluyendo la cajuela. Esta protección es lo suficientemente fuerte para cubrir impactos de armas de calibre .357 o menores.
De acuerdo al equipo de planeación de producto de la marca, casi todos los delitos que se cometen en nuestro país son realizados con armas de fuego dentro de este rango.
Si bien los blindajes en vehículos (específicamente camionetas) de lujo no son ninguna novedad, lo verdaderamente atractivo en la Q5 Security es el hecho que, al ser desarrollada y producida en la planta de Audi en Puebla , ésta no pierde la garantía de fábrica como sucede al hacerlo mediante un servicio posventa.
Al tratarse de un desarrollo interno de parte del equipo de Audi , el alto nivel de equipamiento no se ve mermado o afectado por la instalación de estas protecciones, pues los ensambles y materiales con los que cuenta esta versión son pertenecientes a las categorías de mayor lujo en el catálogo de la marca.
Así pues, en el interior encontramos elementos como el virtual cockpit en el tablero, la pantalla de infoentretenimiento con plataforma Apple CarPlay y sistema de sonido Bang & Olufsen que conviven con materiales como madera, aluminio y piel sin hacernos pensar que nos encontramos en un pequeño tanque.
El momento en el que se siente la diferencia entre este ejemplar y la versión más accesible de la Q5 es al momento de ponerla en movimiento. El aumento de peso a causa del blindaje es de 575 kilogramos y esto se refleja en un andar más asentado al piso.
El llamado “body roll” o transferencia de peso entre maniobras es más evidente y se requiere mayor atención a la conducción para no perder el control de esta camioneta.
No obstante, esto no significa que el desempeño o sensación de manejo se arruine en comparación a la Q5 normal . A pesar de que se mantiene el motor 2.0 litros turbo con potencia de 252 caballos de fuerza, éste sigue resultando solvente para las labores de transporte y maniobras de rebase con un manejo dinámico.
Contrario a la versión convencional, la capacidad de torsión en este modelo es constantemente exigida. No obstante, a pesar de llevarla por las pronunciadas pendientes que se encuentran en los distintos puntos de la Ciudad de México, no podemos decir que los recubrimientos de acero hacen mella en cómo acelera y se desplaza esta Audi.
El otro momento en el que se refleja la diferenciación de este modelo con un “auto cualquiera” está en los costados.
Los elevadores de los vidrios no permiten que estos desciendan en su totalidad, pues las ventanas tienen un monstruoso grosor de 22 milímetros que hacen prácticamente imposible que cruce una bala por este espacio. Asimismo, el movimiento de las puertas debe de realizarse con extremo cuidado, pues su peso aumenta de manera considerable y nos hace pensar que un “machucón” de dedos, podría provocar la completa fractura de estos.
El consumo de combustible no es tan distinto al de una Audi SQ5 y la verdad, pensamos que quien tiene la capacidad económica de hacerse de la variante blindada de esta camioneta, tiene preocupaciones más grandes que las de saber con cuánto dinero se llena el tanque.
Este modelo puede ser solicitado en cualquiera de la concesionarias que tiene Audi a lo largo del país con una variante única que tiene un costo de 1’749,000 pesos.
Según la Asociación Mexicana de Institutos de Seguros, en México el robo de autos ha alcanzado su nivel más alto desde 2011 con más de 90 mil delitos de esta naturaleza a nivel nacional en 2017 por lo cual no podemos echar en saco roto la propuesta de A udi.