El principio del milenio fue una de las mejores épocas para el automovilismo deportivo. En casi todo el mundo, las carreras de autos se convertían en un tema de conversación entre chicos y grandes. Por lo tanto, comenzaba a ser un gran negocio que tenía mucho para ser explotado.
En ese sentido, un Jeque de Dubai vio la oportunidad de juntar dos grandes temas para volverlo un negocio aún más rentable: el patriotismo y las carreras. De esta forma, nació el A1GP, un concurso de monoplazas a nivel global que funcionaría similar a los Juegos Olímpicos.
Su eslogan en inglés era “La copa mundial del automovilismo” y la categoría se puso en marcha en el 2005. Para sorpresa de muchos, comenzó con el pie derecho y parecía que tendría un futuro prometedor.
Las bases eran claras: todos debían de echar mano del mismo monoplaza y cada uno de los equipos tenía que estar conformado en su totalidad por personas del país que representaban. No podías tener miembros extranjeros en tus filas o serías descalificado del mundial.
Al final, el campeón de la categoría no sería un piloto, sino todo el país. Para la primera temporada usaron chasis Lola B05 diseñado especialmente para la categoría. Todos echaban mano del mismo motor V8 de 3.4 litros con 520 caballos de fuerza desarrollado por Zytek.
Este motor tenía que durar toda la temporada y no se le permitían hacer modificaciones. El calendario se conformaba por más de 10 carreras y no se traslapaba con la F1, pues usualmente corrían en fines de semana que la máxima categoría del automovilismo descansaba.
Llegaron a competir hasta 29 países. Algunos como Pakistán o Líbano, quienes inmediatamente se vieron en desventaja contra potencias mundiales del automovilismo como Alemania o Gran Bretaña.
A pesar de su buena popularidad, la FIA jamás la reconoció como una categoría oficial. No obstante, siempre participaron equipos de los 5 continentes, con Sudáfrica como el único representante africano.
Su caída comenzó en la temporada 2008-2009. El mundo atravesó por una fuerte crisis económica que obligo a cancelar varias fechas del campeonato. México fue una de las que tuvieron que cancelarse y el equipo nacional jamás sobresalió en la A1GP .
Esta misma temporada la organización decidió comprarle a Ferrari los derechos del monoplaza F2004. Si eres conocedor del automovilismo, sabrás que este auto fue el que le ayudó a Michael Schumacher a romper todos los récords de la F1.
El motor era un V8 de Ferrari y Maserati, con 600 caballos de fuerza y consiguieron a Michelin como la marca oficial para los neumáticos de la categoría.
Sin embargo, la crisis golpeó fuertemente a los organizadores y equipos, quienes no tenían dinero para comprar un monoplaza para una categoría que no era oficial. Por su parte, Ferrari decidió romper el contrato con la A1GP por cuestión de costos y así la categoría quedó sin proveedor de monoplazas.
En esta categoría pasaron grandes pilotos, como Valentino Rossi y Sebastian Vettel. De igual manera, Nico Hulkenberg fue campeón de la A1GP en 2006-2007. Se dice que Ferrari estuvo a punto de fichar a Valentino Rossi como su piloto para la temporada 2009 gracias a la experiencia que había adquirido en el monoplaza de la A1GP.