Elon Musk, CEO de Tesla, informó ayer que se paraliza el proyecto para construir una fábrica de autos eléctricos en Nuevo León hasta después de las elecciones presidenciales en Estados Unidos, ante la posibilidad de que Donald Trump, a quien apoya, regrese a la Casa Blanca y aplique aranceles a vehículos importados.
“No tiene mucho sentido invertir en México si eso va a pasar”, dijo en una conferencia tras revelar sus resultados trimestrales.
Sin embargo, para expertos, la decisión es una excusa frente a los malos resultados de Tesla en meses recientes, pero también debido a la creciente competencia entre fabricantes de autos eléctricos, sobre todo de China.
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