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Talento, espíritu, determinación y pasión son elementos que comparten tanto el arte culinario como la alta relojería. Consciente de esto, Hublot realiza hoy un maridaje de su savoir faire con el arte de uno de los chefs más importantes en el mundo, Andreas Caminada, hombre de campo cuya gastronomía utiliza sólo productos locales, pues es un amante de los alimentos simples y naturales.
Caminada, quien ostenta el récord de ser el chef europeo más joven en recibir tres estrellas Michelin, se encontró con Ricardo Guadalupe, CEO de Hublot, que quedó fascinado con su arte entre fogones. "Me gustan las cosas bellas", comenta Guadalupe. "Cuando descubrí la cocina de Andreas y tuve la oportunidad de conocerlo, quedé impresionado por su carisma y sencillez. Su forma de cocinar, siempre cercana a lo menos complicado, le otorga mayor nobleza. Además, su carácter afable y determinado encaja a la perfección con los valores que definen a los amigos de Hublot".
Para anunciar esta colaboración, Hublot se trasladó al castillo de Caminadas en Fürstenau, una pequeña villa en Grisons, Suiza, lugar donde parece que el tiempo se ha detenido para salvaguardar lo mejor de la cocina del mundo. Allí, Andreas es capaz de combinar texturas y sabores sin modificar un ápice del sabor original de los ingredientes que usa. Su misión es preservar el espíritu original de la cocina al aplicar gran creatividad a sus platillos.
Dadas todas estas cualidades, Hublot ha tenido el tino de no solo convertirlo en amigo de la marca, sino de invitarlo a preparar un menú de nuevas creaciones, que traerá mayor vida a la revolución relojera que la compañía ha encabezado en años recientes. Se trata de una fusión de saberes que dará de qué hablar en el futuro próximo.
