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Lo ha vuelto a conseguir. Phillips, en colaboración con los expertos de Bacs & Russo, puso el listón de las subastas de relojes muy alto.
La casa de remates encabezó este mercado en 2016 al recaudar 100 millones de dólares (mdd), por delante de Christie’s, que tenía nueve años de líder. Aurel Bacs parece un mago que consigue multiplicar el valor de las piezas de forma estratosférica.
La temporada de primavera en el segmento comenzó el fin de semana del 13 de mayo y las firmas pusieron sobre la mesa sus mejores cartas. Christie’s, Sotheby’s, Antiquorum y Phillips ofrecieron guardatiempos excepcionales candidatos a imponer récords. Entre todas recaudaron 61.7 millones de francos suizos en los eventos de Ginebra.
De ese total, 32.6 millones de francos suizos fueron a parar a Phillips. El rey del martillo fue el Rolex Bao Dai Ref. 6062, que perteneció al último emperador de Vietnam. Su precio máximo
estimado se fijó en 1.5 mdd. Aunque se preveía que lo superaría con facilidad, rompió esquemas con 5 mdd.
Aurel Bacs señaló al diario Le Temps las tres razones que hicieron posible que este Rolex se convirtiera en el más caro del mundo fabricado por esa marca.
“La calidad, la selección y la pasión son tres pilares indispensables en el mercado de subastas”, dijo.
“La calidad debe ser intachable y se refiere al reloj, a los beneficios de la venta, al catálogo, a la sala de subastas. Lo mismo con la selección. Sólo ponemos a la venta 10% de los 2 mil relojes que nos llegan. Y por último, la pasión. No puedes tener éxito en el tenis, la política o los relojes si no lo haces con pasión”, aseguró Bacs.
Agregó un cuarto pilar: la liquidez.
“Hay gran cantidad de dinero disponible en la actualidad, pero no es una lluvia que cae en cualquier sitio. Si los otros tres pilares no existen, la lluvia cae en otro lugar”.
Muchos analistas advierten de una burbuja en este negocio. ¿Qué precio puede alcanzar un reloj? ¿El cielo es el límite? La reflexión es de sentido común.
El Rolex Bao Dai Ref. 6062 fue vendido en 2002 por 235 mil dólares. ¿Cómo es posible que 15 años después valga 22 veces más?
Bacs también tiene una respuesta. “¿Qué diamante, coche o casa te hubieras comprado con ese dinero en 2002 y qué podrías comprar en 2017? Haciendo esta reflexión, veo la multiplicación por 22 como una evolución lógica”.
¿Esto significa que en una década puede costar 10 o 30 mdd? El experto en subastas duda que este Rolex vuelva a estar disponible pronto. Si así fuera, afirmó en Le Temps, podría alcanzar esas cantidades, sobre todo si se considera que los multimillonarios en el mundo aumentan cada año y buscan distinguirse de sus amigos con piezas tan únicas como ésta.
“El precio final y objetivo de un reloj en una subasta es imposible de calcular, siempre es único. Si hay polvo en la esfera, un rasguño en el bisel o cualquier otro detalle, cuenta. Incluso
dos relojes idénticos que se vendan el mismo día en la misma tienda tendrán una historia diferente y, por lo tanto, distintos precios”, dijo el cofundador de Bacs & Russo.
En esta batalla también cuenta el récord de un Rolex Oyster Paul Newman Daytona de oro que alcanzó 3.7 mdd, el precio más alto jamás logrado por un modelo así.
Llamado The Legend, es uno de los tres conocidos de la variante más rara de los modelos emblemáticos Paul Newman Daytona. Su caja de oro con pulsadores atornillados y esfera lemon
grené, duplicó el precio de su estimación de preventa. Y también lo subastó Phillips.
Otro reloj, el Patek Philippe Haile Selassie Ref. 2497, sorprendió por su costo. Éste lo adjudicó el 14 de mayo la casa Chris tie’s. Igual que el Rolex, perteneció a un personaje político, el emperador etíope del mismo nombre. Se vendió por 2.9 mdd.
