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Hace 60 años, Breitling lanzó su reloj de buceo profesional Superocean, rápidamente adoptado por los adeptos al submarinismo profesional y de recreo. Este modelo ha dado, desde entonces, varias generaciones de instrumentos con cualidades acuáticas fuera de lo común.
Para celebrar seis décadas de este guardatiempo pionero, la firma actualiza su diseño, pero conservando los principales rasgos su carácter original. La principal innovación de la nueva colección Superocean Héritage II es un bisel de acero con aro de cerámica high tech ultraduro, irrayable y resistente a los choques. Gracias a la supresión del aro metálido alrededor del círculo minutero, el mismo bisel se integra perfectamente a la esfera, con lo cual se forma un juego estético muy atractivo, adornado por el logo Superocean original.
Esta pieza se presenta en dos modelos de 42 y 46 mm respectivamente, así como un cronógrafo de 46 mm. La tercia está disponible en tres colores: negro, azul y bronce. Las versiones bronce pueden ir acompañadas de un novedoso y exclusivo brazalete formado de caucho y cuero en la misma tonalidad de la caja, así como un detalle pespunteado. Además del cuero, la piel aligátor y el caucho, todos los modelos están disponibles en brazalete de acero trenzado, inspirado directamente de la versión 1957 de este guardatiempo.
El Superocean Héritage II Chronographe 46 late con un movimiento de cronógrafo automático con certificado COSC calibre Breitling 14. La caja es de acero, hermética a 200 m, con corona atornillada. Tiene cristal de zafiro abombado anti-reflejante en ambas caras y tres versiones de esfera: negro Volcano, azul Mariner o Bronce Copperhead.
Los Superocean Héritage II 42 y 46 poseen un calibre Breitling 13 automático de alta frecuencia, también con certificado COSC. Tiene caja de acero, hermética a 200 metros, con cristal de zafiro abombado con anti-reflejante y esferas en los mismos tonos el cronógrafo.
