Aunque la mayoría de los modelos Breitling están pensados para surcar los aires, la marca es igualmente apreciada por los profesionales gracias a sus instrumentos diseñados para conquistar los grandes fondos marinos, como es el caso del Avenger II Seawolf. Estanco hasta 3,000 metros, este reloj excepcional ostenta todos los signos distintivos de un campeón de los fondos abisales: una caja ultrarobusta de 45 mm con una válvula que permite contrarrestar las diferencias de presión entre el exterior y el interior del reloj.
Un bisel giratorio unidireccional para el cálculo de los tiempos de buceo, con cuatro índices móviles que facilitan su manejo, incluso con guantes. Una corona atornillada de doble junta con refuerzos de protección y relieve antideslizante. Índices y agujas sobredimensionados realzados con un revestimiento luminiscente. Un grueso cristal de zafiro abombado con tratamiento antirreflejos por ambas caras.
Para quienes gustan de aunar hazaña y estilo, Breitling propone ahora este superbuceador profesional en edición limitada de 1,000 ejemplares de estilo original, técnico y potente. La caja de acero satinado y el bisel grabado llevan un revestimiento negro ultra resistente a base de carbono. La esfera ofrece un contraste podereoso y atrevido gracias a su inédito color amarillo. Hay versiones con correa de caucho negro Ocean Racer o Diver Pro y brazalete tipo Military de fibra high tech de alta resistencia o brazalete con exterior Military e interior de caucho.
Este reloj Breitling de aguas profundas alberga un movimiento mecánico de cuerda automática con certificado de cronómetro del COSC (Control Oficial Suizo de Cronoómetros). Late a 28,800 alt/h, tiene 25 rubíes.