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Los servicios en streaming y las series de TV son cada vez más populares. “Han demostrado a los espectadores que quedarse en casa viendo la televisión puede ser tanto o más emocionante que ir al cine. Este aumento de la calidad de los contenidos ha dado paso a una nueva era de la televisión”, declaró recientemente la empresa tecnológica LG.
Esta nueva etapa se determina por al menos tres aspectos: 1. Dispositivos (Smart TV’s, tabletas, teléfonos) capaces de reproducir cada vez más eficientemente los contenidos multimedia provenientes de Internet. 2. La generación de contenidos (series y películas) de alta calidad y con uso de lenguaje cinematográfico y, 3. tecnología de distribución de video a través de Internet en alta definición (HD) o incluso en ultra alta definición (4k) sin necesidad de descargarlos antes de visualizarlos, tendencia que se conoce como video streaming (también llamada Over The Top u OTT).
Entre las principales ventajas de los servicios de video en streaming como Netflix está la posibilidad de ver los contenidos bajo demanda. Es decir, en el momento y lugar que cada usuario elija, lo que evita tener que estar al pendiente de los horarios de programación de las diferentes televisoras.
Una de las principales desventajas de las mencionadas plataformas es que no ofrecen transmisiones de eventos deportivos o asuntos de interés público en tiempo real. Otro aspecto que señalan los detractores de este modelo de negocio es que se requiere una conexión a Internet de banda ancha.
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