Después de escuchar el mensaje del presidente Andrés Manuel López Obrador la principal reflexión que debemos hacer los mexicanos es que este país necesita de todos nosotros, no solamente de un hombre, para el verdadero cambio. Fue un discurso que de alguna manera alivia, por todos los años que en este país se ha sufrido por la impunidad y la corrupción, ojalá su idea de nación se haga realidad, ojalá que ese lastre que ha pegado a nuestro país, tanto con políticos como con empresarios sin escrúpulos que se han alineado durante muchos años para lograr su éxito económico, se termine.
Tenemos a un presidente, ahora, que asegura que no le interesa el dinero sino servir al pueblo y ésa debe ser la postura de todos sus colaboradores, esperemos que se comporten a la altura de lo que ha marcado su líder. Sé que mucha gente va a decir que soy un demagogo y que estoy buscando caer bien al grupo en el poder, pero no lo necesito porque seguiré trabajando como desde hace 50 años y como muchos otros mexicanos lo han hecho a lo largo de la historia. Lo único que quiero expresar, es que ya era hora de que en este país tan maravilloso alguien nos alentara desde esa silla a ser mejores mexicanos.
No sé si vamos a lograr rápido cambiar todo lo que nos ha perjudicado, pero escuchamos un discurso con una clara visión de lo que ha sido el país en los últimos 30 años y que se debe modificar. Todos los que amamos a México tenemos que sumarnos y luchar por salir adelante.
Por ahí no me convenció mucho cuando habló del “borrón y cuenta nueva” para aquellos que ya se hicieron millonarios vía la corrupción y que seguramente se estarán riendo de que ya la libraron; otra cosa que no me agradó fue la invitación a Nicolás Maduro, quien ha hecho mucho daño a Venezuela.
Soy un hombre viejo, pero lo que más me interesa es que le vaya bien a México. Por eso sé que la única forma de que eso suceda es que todos trabajemos juntos. Espero que este primer discurso como presidente no hayan sido palabras hacia afuera, que sea real y que cada uno de los funcionarios de su gabinete de verdad se ponga a trabajar en beneficio de todos nosotros y no de unos cuantos.
Que hay dudas, por supuesto que las hay, como cada que inicia un ciclo, pero como el resto de los habitantes de esta nación, no me queda más que seguir adelante con mi aportación, que es fomentar la disciplina y competencia en el deporte, apoyar con la estabilidad y creación de empleos porque es lo que se necesita.
Sé que hay mucha gente que no piensa de manera optimista, pero no hay otra forma para salir adelante que apoyar al presidente, porque no es una lucha de un solo hombre; debemos ayudar a que cumplan su palabra, estar atentos a su labor, a que lo hagan con transparencia. Ojalá este mensaje se haga una realidad, que México cambie porque no me gustaría pensar que no tenemos remedio, prefiero creer que podemos tener un mejor futuro.
Y no quería terminar sin mencionar algo que pareciera lo menos importante en este cambio que el país debe trabajar. Me refiero a la apertura de la que fuera la residencia oficial de Los Pinos, como parte de los lugares a visitar para todos los mexicanos y extranjeros. En verdad que dan ganas de ir para conocer más de un lugar que parecía inalcanzable.
Profesor