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“Nunca dejes de luchar”, con esa frase, Luis Rodrigo Martínez Fernández, de 15 años de edad, afrontó la calificación errónea que en un primer momento le otorgó la Universidad Nacional Autónoma de México y que lo tuvo cinco días a la expectativa de si conseguiría iniciar clases en el bachillerato este ciclo escolar, o no.
Luis Rodrigo fue uno de los 11 mil 51 alumnos afectados por el error de la UNAM al calificar los exámenes de asignación de la Comisión de Instituciones de Educación Media Superior ( Comipems ). Su resultado inicial fueron 36 aciertos: insuficientes para ingresar no sólo a su primera opción, el plantel 6 de la Escuela Nacional Preparatoria “Antonio Caso”, sino a cualquier preparatoria en la Ciudad de México y la zona metropolitana.
Como hasta ese momento 50 mil estudiantes, Rodrigo había quedado como aspirante “CDO”, con derecho a otra opción, lo que quiere decir que una vez que se hubieran ocupado todos los lugares en todas las escuelas de la ciudad, él podría elegir entre los planteles que quedaran disponibles.
"Me sentía muy preparado y muy seguro cuando fui a presentar mi examen, por eso me llevé una gran sorpresa y creí que no eran mis resultados reales. Estaba desconfiando hasta de lo que había presentado, pensé que rellené mal los alveolos o que tuve un error personal", dijo.
El examen diseñado y calificado por la UNAM y aplicado por Comipems consta de 128 preguntas. Matemáticamente, los 36 aciertos que le designó la institución en un primer momento, querrían decir que a pesar de su esfuerzo por estudiar, de haber repasado todos los días durante seis meses, de haber dejado de practicar el fútbol (su más grande pasión) y de haberse esforzado diariamente, sólo habría contestado correctamente una de cada cuatro preguntas.
"El día 5 de agosto me llevé una gran sorpresa ya que había tenido 36 aciertos. La verdad sí me impacté mucho y me sentí muy apantallado por ese resultado, no sabía qué hacer", contó.
Al día siguiente se abrió una ventana, cuando entre aspirantes comenzaron a comunicarse entre sí y a postear en redes sociales que los alumnos que habían presentado sus exámenes de ingreso en diversas sedes de la delegación Iztapalapa en la Ciudad de México: cientos y cientos de adolescentes con puntuaciones que no superaban los 40 aciertos.
La universidad reconoció días después, hasta el martes, que había cometido un error y que revisaría los exámenes de 11 mil aspirantes para rectificar las calificaciones. Ayer por la noche, Luis Rodrigo recibió su verdadera puntuación: 97 aciertos para ingresar al Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH) Sur de la UNAM.
Si termina la preparatoria en tres años, con un promedio superior a 9, esto significará que Rodrigo podrá estudiar la carrera de su elección en la sede de su preferencia en la UNAM, y no deberá volverse a enfrentar a un examen de admisión que, para licenciatura, sólo pasa uno de cada diez alumnos.
"Tú sabes lo que vales, en la vida va a haber muchos obstáculos, te vas a caer muchas veces pero pienso que cuando te caes tienes que saber lo que vales para poder levantarte, y así decides si te levantas o te quedas tirado”, contó.
“La lección que tomo es que nunca dejes de luchar por lo que has conseguido hasta que te hagan saber de una manera legal y legítima, recta, tus verdaderos resultados en Comipems y en la vida".
ml
