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Los maestros deben inspirar, afirma Abeljared Pérez Calvo, profesor que imparte la materia de Tecnología con énfasis en circuitos eléctricos en la Secundaria Técnica 43, en la Ciudad de México.
Además, dirige el coro de la escuela con el que ha ganado, tres veces, el concurso de interpretación del Himno Nacional mexicano.
Para este profesor, de 33 años de edad, el punto es dar “el extra” y lo demuestra con el ejemplo, puesto que todos los lunes dedica dos horas adicionales a su horario laboral para impartir el taller de coro.
Lo hace porque le gusta la música y está convencido de que tener arte en sus vidas, ayudará a sus alumnos a obtener un mejor aprovechamiento escolar y a desarrollar competencias que los convertirán en mejores seres humanos.
“Participar en el coro ha permeado en los estudiantes no sólo de manera artística, sino también en la expresión, porque la música es un medio de expresión y comunicación, necesitamos fomentarlo. Nosotros ensayamos los lunes, es una actividad extracurricular que no les da créditos, pero los muchachos se quedan porque para ellos es una forma de expresarse, descubrir sus talentos”, comentó.
Abeljared nació en una familia de maestros, pero él no estudió para serlo. Su especialidad es la ingeniería y aunque todavía hace algunos trabajos profesionales fuera del horario de clases, en realidad su vocación está en la docencia.
Sus estudiantes, presume, cantan en otros idiomas diferentes al español. Su estrategia consiste en enseñarles la manera de pronunciarlas y que practiquen en casa.