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La tercera fue la vencida para Eugenio Caballero. El mexicano se elevó ayer con su primer premio Goya a lo mejor del cine español en la categoría de Dirección Artística, gracias a su trabajo en Un monstruo viene a verme.
Antes había estado nominado al galardón por la fantasiosa película El laberinto del fauno, que le valió un Oscar en 2007 y Lo imposible, dirigida por Juan Antonio Bayona.
Bayona fue quien lo llamó de nuevo para Un monstruo viene a verme, cinta basada en una novela de Patrick Ness, que narra la historia de un niño de 12 años de edad, quien trata de hacer frente a la enfermedad de su madre con la ayuda de un ser mágico que lo visita por las noches.
“¡Se ganó!”, dijo Eugenio del otro lado de la línea telefónica.
“Pero, al final, para mí los reconocimientos cobran importancia en función de la película. A mí lo que me interesa es que conecte con la gente y sigo pensándolo”, abundó.
El presidente Enrique Peña Nieto lo felicitó vía Twitter: “Muchas felicidades a Eugenio Caballero por ganar el premio #Goya2017 a la Mejor Dirección Artística”.
La Dirección Artística (Diseño de producción o de Arte, en otro países, como México), es la responsable de diseñar sets y los ambientes físicos para contar la historia.
Para Un monstruo viene a verme, además de construir físicamente algunas parte del cuerpo de un árbol gigante, también fue responsable de otras cosas como dos casas, todo en foro.
Caballero no asistió a la ceremonia de premiación en España, por estar trabajando en Roma, el nuevo proyecto del también ganador del Oscar el mexicano Alfonso Cuarón.
Un monstruo viene a verme le significó un año de preparación y aprender de procesos digitales como el Motion Capture (MoCa), el cual consiste en ponerle a actores detectores especiales y registrar sus movimientos para luego reproducirlos en seres míticos.
Un ejemplo de ello es Golum, de la trilogía El señor de los anillos.
“Hice una investigación muy grande de cómo eran las casas en ese lugar de Inglaterra, de cómo vivía la gente, cómo eran los elementos mitológicos de la zona y cómo eran las escuelas públicas, cosas que al final ayudan a crear la película”, explicó.
El trabajo de Caballero ha sido visto en filmes como la hollywoodense Resident evil: extinction y las mexicanas Me estás matando Susana y Zurdo.
“A los premios no les pongo demasiada atención, es parte del trabajo”, declaró.
Los otros mexicanos que competían por el Goya, Las elegidas, dirigida por David Pablos, y Desde allá, coproducida por Guillermo Arriaga (Amores perros) y Michel Franco (Después de Lucía), se fueron con las manos vacías en la categoría de Mejor Película Iberoamericana, donde triunfó la argentina El ciudadano ilustre.