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Padres de los 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos desaparecidos en Iguala, Guerrero, se reunirán por primera vez con el procurador Raúl Cervantes Andrade el 9 de febrero próximo y con el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, al día siguiente.
Un grupo de padres de las víctimas fue recibido por la subprocuradora de Derechos Humanos de la Procuraduría General de la República (PGR), Sara Irene Herrerías, para planear los próximos encuentros.
Esta es la primera vez que los afectados tendrán un encuentro con Cervantes Andrade desde que asumió el cargo en octubre del año pasado.
Además, se reactivará el diálogo con la PGR, suspendido en agosto de 2016, cuando los padres de los normalistas pusieron como condición la destitución del entonces titular de la Agencia de Investigación Criminal, Tomás Zerón de Lucio.
“El nuevo procurador no se ha dignado a dar los avances sobre las investigaciones de la desaparición de los 43 jóvenes. Por eso aquí estamos y seguiremos hasta que nos den información las autoridades”, acusó Melitón Ortega, uno de los padres inconformes.
La jornada para conmemorar los 28 meses de la desaparición de los jóvenes, el 26 de septiembre de 2014, comenzó desde las 10:00 horas frente a las instalaciones de la PGR ubicadas sobre Paseo de la Reforma.
Familiares de las víctimas y simpatizantes del movimiento se manifestaron hasta las 15:15 horas. Durante el mitin se “clausuraron” las entradas del edificio y jóvenes encapuchados realizaron pintas en las vallas de seguridad y en los ventanales.
En la protesta, los inconformes bloquearon las calles Río Neva, Río Guadiana y el carril lateral de Paseo de la Reforma. La protesta finalizó con la fachada de la PGR llena de huevos podridos y con la palabra “Asesinos” en el piso de la puerta principal.
“Si a ustedes les faltan huevos, a nosotros nos sobran”, gritaban mientras reventaban huevos podridos en puertas y fachada del edificio. Con pintura en spray encapuchados pintaron el 43 en color rojo y la frase: “Te vamos a matar Peña” en color negro.
Las actividades de conmemoración continuaron al pie del Ángel de la Independencia, donde salió un contingente de más de 500 personas con dirección al Zócalo.
A las 17:00 horas, el contingente comenzó su avance. Los manifestantes exigieron, como cada mes, la aparición con vida de los estudiantes, el esclarecimiento de los hechos y se pronunciaron en contra del gasolinazo.
Organizaciones civiles acompañaron a padres de las víctimas y estudiantes de la normal de Ayotzinapa, quienes encabezaron la marcha.
Durante más de dos horas el contingente avanzó sobre Paseo de la Reforma y al llegar a la esquina de Bucareli, donde se ubica el “antimonumento” +43, el grupo se detuvo para realizar el pase de lista. Después del nombre de cada uno de los desaparecidos, en lugar de decir “presente”, los parientes y amigos inconformes gritaban “presentación con vida”.
La marcha continuó sobre avenida Juárez, donde el tráfico se vio afectado por algunos minutos porque se cerró el paso vehicular en tanto el contingente de padres avanzaba.
La movilización finalizó en la plancha del Zócalo a las 19:30 horas.
Padres y madres de las víctimas emitieron un discurso y agradecieron a las organizaciones que mes con mes los acompañan en su protesta.
“Sabemos que no estamos solos”, dijo Melitón. Vidulfo Rosales, abogado y vocero de los padres, anunció la creación del Plan de Lucha Único “para enfrentar al sistema político y económico de la actualidad”.
El plan solicita un encuentro entre grupos sociales, populares y vulnerables que se llevaría a cabo el 25 y 26 de febrero para definir acciones.
“Realizaremos un encuentro con los sectores más vulnerables, pobres y populares, para que tengamos un proyecto de lucha conjunto y unido, a fin de enfrentar al sector político y económico que tanto ha afectado a los mexicanos”, dijo Rosales.
