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El titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Aurelio Nuño, responsabilizó a los gobiernos de Vicente Fox y Felipe Calderón, así como a la ex presidenta del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), Elba Esther Gordillo, de los resultados que tuvo México en la prueba PISA 2015.
En entrevista televisiva, Nuño dijo “sí” cuando el columnista de EL UNIVERSAL Carlos Loret de Mola le preguntó si habían sido los ex presidentes y Gordillo los responsables del estancamiento. Antes, mencionó que “tiene mucho que ver”, en referencia a las afirmaciones de la organización Mexicanos Primero, sobre que la responsabilidad recae en esos personajes.
“Los jóvenes que presentaron la prueba entraron al sistema educativo en 2006. Cuando empezaron las pruebas PISA en 2000, y que por primera vez se pudo ver a México en comparación con otros países, no se planteó nada, no sé si porque no se pudo o no se quiso hacer. Incluso empeoró”, dijo.
Comentó que la reforma educativa tiene el propósito de ir precisamente en contra de los sindicatos que quieren tomar las riendas del sistema educativo nacional, lo cual ocurrió con el SNTE de la era Gordillo.
“La realidad de la educación en México llegó al nivel de no saber cuántas escuelas había en México, cuántos maestros. La entrega que se dio en gobiernos pasados a Elba Esther Gordillo es parte [de la] consecuencia”.
El funcionario confió en que para la próxima prueba PISA —que se aplica en marzo de 2018 y cuyos resultados se darán a conocer en 2019— se podrán ver algunas mejorías, aunque reiteró que los cambios realmente significativos se verán reflejados en 10 años.
Los alumnos que se van a evaluar en 2018 entraron al sistema educativo en 2008. “El cambio va a ser pausado”, afirmó.