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justiciaysociedad@eluniversal.com.mx
Hoy los más de 100 obispos que conforman la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) inaugurarán su 102 Asamblea Plenaria con una misa en la Basílica de Guadalupe. Darán la bienvenida al nuevo nuncio apostólico Franco Coppola y arrancará la “reconfiguración sutil, pero eficientemente” de la jerarquía católica en México.
El representante de la Santa Sede dará su primera conferencia de prensa oficial desde que llegó al país. La Asamblea Plenaria tendrá lugar del 7 al 11 de noviembre, donde los obispos se reunirán en la sede de la CEM del Lago de Guadalupe con el fin de reflexionar y elaborar el proyecto de Iglesia para México con miras hacia 2031.
“Para esto nos situaremos en la realidad que nos rodea y los desafíos que debemos responder teniendo siempre una mirada esperanzadora”.
Para Felipe Monroy, analista de temas religiosos, los dos acontecimientos centrales que marcarán la asamblea son la llegada del nuncio apostólico Franco Coppola, quien hace apenas dos semanas entregó sus cartas credenciales al presidente Enrique Peña Nieto.
“Estos dos hechos reconfiguran el perfil del Episcopado. Los cinco cardenales mexicanos podrán asumir un protagonismo interesante en las futuras sucesiones arzobispales de gran impacto para el país: México y Oaxaca. Va a ser fundamental el conocimiento y diálogo del nuncio con la Iglesia nacional para encontrar coincidencias en esa vía mexicana, que el propio Co-ppola desea para abordar agendas sociales polémicas”, expresó.
Comentó que el periodo elegido, 2031, para el establecimiento de su agenda pastoral “no es un capricho”, sino que responde a la conmemoración de medio milenio de presencia católica en México.
“El plan parece ambicioso y veremos si es posible llevarlo a cabo, porque para lograr un extendido consenso entre los obispos, antes se requiere que los organismos de la CEM realmente trabajen coordinadamente y logren articular los diferentes esfuerzos que a lo largo y ancho del país se realizan en áreas específicas”, destacó.
Elio Masferrer, investigador de la Escuela Nacional de Antropología e Historia, consideró que durante la asamblea se abordará la visita del papa Francisco, debido a que hay un nuevo nuncio apostólico.
Comentó que al buscar establecer un programa pastoral hasta 2031 se generará un “conflicto significativo” entre las diferentes “líneas” que coexisten en el Episcopado, como son la que proclama la doctrina social de la Iglesia, los grupos conservadores que estuvieron en favor de las marchas por la familia y quienes buscan aplicar la línea del papa Francisco.
“Va a haber una tensión entre estos grupos, las líneas se van a confrontar, a ver en el plan de la Iglesia qué ponen, tienen que hacer algo de lo que Francisco viene planteando, hay un nuevo nuncio quien trae instrucciones muy completas de aplicar una política.
“No creo que el nuncio los presione demasiado, pero será una manera de que Francisco trate de poner orden a obispos y arzobispos, para que apliquen la doctrina social de la Iglesia”, apuntó Masferrer.
En México las Asambleas Plenarias empezaron después del Concilio Vaticano II, en 1965.