Más Información
El vicecoordinador del PRD en la Cámara de Diputados, Jesús Zambrano Grijalva, señaló que es preciso concretar de manera urgente una política nacional de incremento a los salarios en México para desactivar lo que puede ser un instrumento de presión contra México desde la administración de Donald Trump en las negociaciones para revisar los vínculos comerciales de ambos países, particularmente el Tratado de Libre Comercio (TLC).
El legislador dijo que los minisalarios de México serán un ingrediente político que perjudicará a nuestro país, y se debe actuar incluso antes de que la Comisión Nacional de Salarios Mínimos (Conasami) dé a conocer el monto para 2017, que se estima no podría ser mayor a 2.50 pesos para quedar en 75.54 pesos diarios, según el informe final que contiene los resultados de las investigaciones, estudios efectuados, sugerencias y estudios de trabajadores y patrones para fijar la política salarial del año próximo.
Zambrano Grijalva dijo que el minisalario no podrá sufrir un incremento mayor a 3.5%; es decir, menos que el año pasado, que fue de 4.2%, equivalente a 2.94 pesos.
Reiteró que un trabajador mexicano requiere ingresos mínimos diarios por 89.26 pesos y si la Conasami da por buenos los 75.54 pesos diarios, “estaremos condenando al país a mayores condiciones de miseria, desigualdad e inseguridad en un mercado laboral que sigue siendo dominado por la economía informal, con 60 de cada 100 empleos; además de que Trump podrá acusar a México de competencia desleal por los bajos salarios que en nuestro país se manejan”.
Citó por ejemplo que en Arizona se prepara un aumento del mínimo de 8 a 10 dólares —160 a 200 pesos— la hora el próximo año y seguirá fortaleciéndose de forma incremental; Washington pasaría de 9.47 dólares (189 pesos) a 13.5 (270 pesos por hora); en tanto que en Colorado el salario mínimo por hora transitará de 8.31 dólares —166 pesos— a 9.30 dólares —186 pesos— con incrementos concertados a 90 centavos cada año hasta llegar a 12 dólares (240 pesos) la hora a 2020.
Zambrano subrayó que “México no está preparado para la oleada de deportaciones que, según ha amenazado Trump, ocurrirá a partir del siguiente año y señaló que si bien es cierto que ha habido deportaciones significativas en la administración de Barack Obama, no han sido de la naturaleza con la que amenaza el mandatario electo estadounidense”.
