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Con la inminente consagración como nuevo cardenal del arzobispo de Tlalnepantla, Carlos Aguiar Retes, los purpurados mexicanos vivos ascienden a seis, de los cuales cuatro podrán ingresar en un futuro Cónclave para elegir Papa.
Junto con Aguiar (66 años), los otros purpurados del país que tienen menos de 80 años y por ello conservan el título de “electores” son: Norberto Rivera Carrera (74), José Francisco Robles Ortega (67) y Alberto Suárez Inda (77).
En cambio, Juan Sandoval Iñiguez (83) y Javier Lozano Barragán (83) ya superaron ese límite y quedaron sin posibilidad de entrar a un futuro Cónclave.
Este día Francisco anunció que el próximo 19 de noviembre encabezará un Consistorio público para la creación de 17 nuevos cardenales, 13 de los cuales serán electores (como Aguiar) y otros cuatro mayores, quienes serán distinguidos por su contribución particular a la Iglesia.
Según las estadísticas oficiales del Vaticano, a partir de ese día los integrantes del Colegio Cardenalicio serán 228, de los cuales 121 electores y 107 no electores. De este total, uno fue creado por el Papa Pablo VI, 94 por Juan Pablo II, 78 por Benedicto XVI y 55 por Francisco.
Pero si se considera sólo los cardenales electores, del total unos 21 recibieron el birrete colorado de manos de Karol Wojtyla, 56 de manos de Joseph Ratzinger y 44 de Jorge Mario Bergoglio. Los purpurados provienen de 79 países distintos.
Si se considera sólo los electores y con datos a partir del 19 de noviembre, 54 de ellos provienen de Europa, 34 del Continente Americano, 15 de Africa, 14 de Asia y cuatro de Oceanía.
En lo que va de su pontificado el Papa argentino introdujo una importante internacionalización del Colegio Cardenalicio, elevando sensiblemente el número de integrantes “extraeuropeos”.
Así, mientras los purpurados que lo eligieron como líder de la Iglesia católica eran una mayoría numérica del “viejo continente”, con Francisco se invirtió la tendencia. Con este nuevo Consistorio, los cardenales de Europa quedarán en 54 y los que provienen de fuera del continente suman 67.
Además, el país con más electores es Italia (con 25), Estados Unidos (10), Francia y Brasil (cinco cada uno), España, México, India y Polonia (cuatro por país), Canadá y Alemania (tres), Portugal, Filipinas, Venezuela y Argentina (dos cada uno).
El Consistorio anunciado este día incluye varias sorpresas, con decisiones peculiares tomadas por el Papa, por ejemplo la designación como cardenal de un nuncio apostólico, hecho raro y con muy pocos antecedentes en la época moderna.
En esta ocasión Francisco decidió distinguir a Mario Zenari, embajador vaticano en Siria y aclaró que seguirá manteniendo ese puesto. Una determinación que pareció ser una apuesta de cara a una solución de la crisis violenta que desgarra a ese país desde hace años.
Al mismo tiempo, el pontífice quiso distinguir al clérigo albanés Ernest Simoni Troshani. Se trata de un sacerdote, no un obispo o arzobispo, y en pocos días cumplirá los 88 años.
El 21 de septiembre de 2014, durante su viaje apostólico a ese país, Bergoglio escuchó el conmovedor testimonio de ese cura, arrestado en 1963 por la policía comunista y liberado en 1990 tres 27 años de trabajos forzados.
Aquella historia de torturas y suplicios, pero también de esperanza, sorprendió al Papa, quien se mostró conmocionado hasta las lágrimas y al final no sólo abrazó al sacerdote, también le besó las manos.
“De verdad, escuchar hablar a un mártir sobre el propio martirio es fuerte, creo que todos estábamos conmovidos por estos testimonios que hablaban con naturalidad y humildad, y que parecían casi contar las historias de las vidas de otros”, confesó después Francisco.
Además, el pontífice designó como cardenal a un joven arzobispo de 49 años. Se trata de Dieudonné Nzapalainga, arzobispo de Bangui en la República Centroafricana, uno de los artífices de los acuerdos de paz que acabaron con una intensa guerra civil en ese país.