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JUCHITÁN, Oax.— Las activistas de la comunidad Muxhe- nguiiu (homosexual y lesbiana), se alistan para dar la batalla a favor del matrimonio entre personas del mismo sexo y el derecho a la adopción, intensificando el cabildeo entre los legisladores mexicanos.

“La comunidad lésbico, gay, transgénero y transexual no puede seguir escondiendo en la clandestinidad sus respectivas relaciones”, señaló el codirector de Políticas Públicas para la Diversidad Sexual del ayuntamiento juchiteco, Biiniza Medina Carrillo.

El derecho a vivir en libertad nuestra responsabilidad sexual es la esencia de las tres iniciativas que presentó el presidente Peña Nieto y desde la comunidad muxhe del Istmo de Tehuantepec vamos a intensificar nuestros esfuerzos para que contemos con la protección del marco legal, dijo.

Medina Carrillo exhortó a la jerarquía católica de México para que respete la naturaleza laica del Estado mexicano y deje a un lado el discurso homofóbico que alienta más el odio en contra de la comunidad lésbico, gay, bisexual, transexual, travesti, transgénero e intersexual (LGBTTTI).

Los curas católicos, dijo, deberían voltear sus miradas hacia el papel tolerante de la Iglesia en el Istmo de Tehuantepec, que desde hace 20 años celebra puntualmente una misa en la iglesia de San Vicente Ferrer, con la participación de los muxhes de la etnia zapoteca.

Esa celebración eucarística, recordó, nació para hon- rar la memoria de los muxhes fallecidos y para bendecir la diversidad sexual en el contexto de la vela que organizan los integrantes de la asociación Auténticas Intrépidas.

La vela de las Auténticas Intrépidas se realiza desde 1975 cada tercer sábado de noviembre. La vela ha inspirado la realización de documentales que proyecta las actividades que realizan los muxhes en la vida económica y social de esta ciudad y la lucha que libran contra el VIH/sida.

Según cifras de la Dirección de Políticas Públicas para la Diversidad Sexual del ayuntamiento juchiteco, en la región del Istmo hay unos cuatro mil muxhes o personas “trans”. En esta ciudad hay un censo de 868 muxhes, de los cuales 436 se asumen como mujeres. “Todas esas personas tienen el pleno derecho a vivir en libertad su identidad de género, tienen el derecho de casarse con personas de su mismo sexo y el derecho a la adopción. Por eso es importante que los diputados aprueben las iniciativas que envió el presidente Peña”.

Por el momento, la comunidad muxhe no contempla marchas a favor del matrimonio entre personas del mismo sexo: “Vamos a ser cuidadosos para no confrontarnos con la Iglesia, dijo Carrillo Medina.

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