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En la Sierra Madre Occidental, Diconsa representa un pilar de supervivencia para pequeñas poblaciones rurales que se apoyan en los programas sociales del gobierno federal a las que abastece mensualmente 550 toneladas de alimentos sanos, variados y suficientes a través del almacén Altares y 85 tiendas comunitarias.
El subgerente de la Unidad Operativa Durango, Rubén Ontiveros Palacio, relató que para acudir a la tienda comunitaria Guamúchil, en el municipio de Santiago Papasquiaro, los choferes tienen que manejar hasta 14 horas por brechas.
“El apoyo de Diconsa resulta fundamental para estas comunidades con carencia económica y alimentaria, pues sólo en nuestras tiendas se pueden encontrar productos de calidad de la canasta básica al mejor precio”, subrayó.
En un comunicado de la dependencia se informó que para llegar a la tienda La Bufa, en Tepehuanes, los choferes recorren sinuosos caminos de 10 horas y por peligrosos y resbaladizos caminos se surte la pequeña localidad de Campanilla.
Ontiveros Palacio explicó que, en temporada de lluvias, los camiones de la distribuidora suelen derraparse o atascarse en angostos caminos de la Sierra Madre Occidental que colindan con Sinaloa, además de sortear pendientes o detener por completo la marcha de los vehículos para limpiar el camino de
troncos o piedras.
De las 85 tiendas comunitarias que abastece el almacén rural Altares, 10 cuentan con servicio de lechería; mientras que otras 18 entregan dinero en efectivo del programa federal Prospera.
A nivel estatal, Diconsa Durango garantiza el acceso permanente a una alimentación sana y para ello cuenta con un almacén central y 10 rurales que, a su vez, surten 720 tiendas comunitarias fijas, nueve tiendas móviles y un Centro de Atención a Beneficiarios, donde las personas acuden por el canje de la Tarjeta SINHambre.
cfe
