La reanudación de relaciones diplomáticas entre Estados Unidos y Cuba ha generado una oleada inusitada de cubanos por la frontera mexicano-estadounidense, según las cifras más recientes de las autoridades fronterizas de ese país.
Entre febrero y marzo cientos de cubanos, incluidos algunos de los que estaban varados en Centroamérica, se presentaron en los puertos de entrada de El Paso, Texas, para solicitar su ingreso al país, dijeron ayer las autoridades migratorias.
En lo que va del año fiscal, entre octubre de 2015 y marzo del presente año, mil 583 inmigrantes cubanos han sido recibidos en Estados Unidos tras presentarse en los puentes internacionales de esta región, según el Servicio de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés). De esa cifra, mil 301 ingresaron entre febrero y marzo.
En febrero, un promedio diario de 18 cubanos entraron a Estados Unidos por los puertos fronterizos de El Paso, y un mes después pasaron a ser 25 al día, de acuerdo con esa institución federal dependiente del Departamento de Seguridad Nacional. Según los informes del CBP, en el año fiscal 2016, hasta enero, una media mensual de 70 cubanos entraba por El Paso.
Desde mediados de la década de 1960, la llamada Ley de Ajuste Cubano otorga refugio de manera automática a los cubanos al pisar territorio de Estados Unidos, en consideración de la persecución política de la que pueden ser objeto en su país.
El restablecimiento de las relaciones entre ambos países, con la apertura de embajadas, ha suscitado el temor a que se eliminen esas ventajas migratorias a los cubanos, razón a la que los expertos en inmigración atribuyen el nuevo éxodo de la isla hacia Estados Unidos.
Rubén Jáuregui, portavoz de Aduanas y Protección Fronteriza de El Paso, dijo que si un ciudadano cubano se presenta en un puerto de entrada de Estados Unidos sólo debe proporcionar una prueba de su ciudadanía cubana, como un pasaporte o un certificado de nacimiento.
Explicó que después los funcionarios del CBP le preguntan si es miembro del régimen cubano o trabaja para el gobierno, entre otras cuestiones que determinen si cumple los requisitos para permanecer en esa nación mientras completa su trámite migratorio.
“El oficial del CBP emite al viajero un documento de libertad condicional I-94, con número de residencia temporal”, detalló.
El documento de libertad condicional es válido por dos años. Un año después de la inspección y la admisión a Estados Unidos el inmigrante cubano puede solicitar su residencia permanente. En Texas, la frontera de Laredo ha sido la más empleada por los inmigrantes.
De acuerdo con información del CBP, durante el año fiscal 2016, hasta marzo, se han internado 22 mil 944 personas provenientes de la isla. A partir de 2014 se incrementó el número de cubanos que huyen de su país, después de que Estados Unidos y Cuba anunciaron la nueva era en sus relaciones.