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natalia.gomez@eluniversal.com.mx
Autoridades de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) han establecido algunos contactos con ocupantes del auditorio Justo Sierra de la Facultad de Filosofía y Letras (FFyL), a fin de lograr la entrega del recinto a la comunidad universitaria.
“Procuramos tener contacto con ellos [los ocupantes del espacio] y manifestarles que fue suficiente. Buscamos los canales, hubo uno que otro contacto, esperamos dialogar con ellos”, informó el rector Enrique Graue.
En entrevista, afirmó que la comunidad universitaria “está harta” de la ocupación ilícita del auditorio Justo Sierra, administrado desde 2000 por diversos grupos.
“Es un espacio que corresponde a todos los jóvenes”, subrayó al admitir que se vive una indignación generalizada en la comunidad universitaria ante la toma del auditorio de la Facultad de Filosofía y Letras.
Explicó que están en la búsqueda de cómo podrían respaldar los alumnos, académicos, investigadores y los trabajadores la desocupación del auditorio.
Refirió que los ex rectores se han manifestado en favor de la Universidad y son solidarios con la intención de la comunidad de recuperar el espacio.
Agustín Rodríguez, líder del Sindicato de Trabajadores de la UNAM (STUNAM), aseguró que respaldan la solicitud que han hecho las autoridades sobre la entrega del auditorio Justo Sierra.
“Lo que hemos visto es que quienes se encuentran ahí [en el espacio de la Facultad de Filosofía y Letras] no son estudiantes, no tienen ninguna relación con la Universidad, por eso respaldamos el reclamo. Si estuvieran estudiantes en defensa de un objetivo, una lucha o un grupo estudiantil lo respetaríamos y lo respaldaríamos, pero en esta ocasión no es eso y lo que pedimos es que lo entreguen de inmediato”, apuntó, y precisó que no apoyarán una acción represiva, sino una que involucre el diálogo.
Narcomenudeo. Graue también expresó su indignación por la decisión de un juez de reclasificar el delito que se le imputa a Jorge Emilio Esquivel Muñoz, El Yorch, un presunto narcomenudista que forma parte del grupo que tiene ocupado el auditorio Justo Sierra, quien podría quedar libre al pagar más de 8 mil pesos de multa.
“Estoy indignado porque con lo que cargaba encima se consideró como un delito menor, pero es realmente un problema de la Procuraduría General de la República y sí estamos sentidos por eso.
“No me parece razonable que con 50 grapas y 300 gramos de marihuana sea portador para uso personal”, declaró el rector de
la UNAM.
