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justiciaysociedad@eluniversal.com.mx
Consumir alimentos naturales, preparar sólo los que se comerán durante el día, así como mantenerlos en lugares frescos, son algunas medidas de prevención que recomendó el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) para evitar problemas gastrointestinales por la ingesta de víveres contaminados o echados a perder.
Teresa Salazar Cordero, jefa del Departamento Clínico de la Unidad de Medicina Familiar (UMF) número 45 del IMSS, informó que ante la llegada de las temporadas de calor, primavera y verano, la carne, la leche, derivados de la misma, así como pescados y mariscos son alimentos que se deterioran con mayor facilidad, por lo que se debe evitar ingerirlos en la calle.
Indicó que los alimentos se deben consumir en el menor tiempo posible y evitar guardarlos por periodos prolongados dentro del refrigerador, puesto que pueden producirse toxinas por la degradación propia del alimento.
Explicó la importancia de tomar medidas precautorias en el consumo de víveres, tanto en casa como en la calle, puesto que a través de éstos las bacterias, virus y parásitos ingresan al organismo y ocasionan infecciones como gastroenteritis, salmonelosis, tifoidea, cólera y enfermedad por rotavirus.
Salazar Cordero apuntó que estas enfermedades se manifiestan con fiebre, dolor estomacal o abdominal, náuseas, vómito, diarrea, estreñimiento y deshidratación. Ante la presencia de algunos de estos síntomas es importante acudir a su Unidad de Medicina Familiar correspondiente para recibir diagnóstico y tratamiento oportunos.
Afirmó que hasta 90% de los pacientes que acuden a consulta presentan un cuadro de enfermedades gastrointestinales, derivadas del consumo de alimentos y agua contaminados.
Insistió en la importancia de revisar, observar, oler los víveres que se van a ingerir, en casa o en la calle, para saber si están en buen estado, y evitar consumir alimentos crudos.