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La visita del papa Francisco a México no sólo ha movilizado a las autoridades del país anfitrión, debido a que estará hoy en la región fronteriza de Ciudad Juárez, Chihuahua; el gobierno de Estados Unidos también colabora para garantizar la seguridad de la gente.
“Hemos coordinado estos operativos con diferentes departamentos del gobierno mexicano”, comentó a EL UNIVERSAL el oficial de la Patrulla Fronteriza, Rubén Jáuregui, quien tiene su base en El Paso, Texas.
“Tenemos operativos con otros departamentos y agencias —no sólo la Patrulla Fronteriza y Aduanas— que también tienen elementos que normalmente no usan uniforme —agentes encubiertos—. Seguro, son parte de los operativos que tendremos, entre otras medidas, y que no podemos compartir con el público para que el crimen no tome ventaja”, explicó.
El oficial encargado de las Relaciones Públicas de la Patrulla Fronteriza en El Paso, Texas, Roger Maier, informó que “no vamos a entrar en números relacionados con las personas que tenemos trabajando”.
Agentes, armas, vehículos y tecnología. En El Paso, Texas, están asignados alrededor de 2 mil 500 agentes de la Patrulla Fronteriza, de los más de 20 mil que operan en la frontera sur de la Unión Americana. Observadores señalaron que podrían llegar a sumar alrededor de 7 mil elementos de diversas agencias federales, incluidas la Fuerza Aérea estadounidense y de Marines.
“Es algo que siempre hacemos juntos, somos del mismo departamento”, confirmó Jáuregui. “Ellos nos ayudan con los ojos arriba, en el aire, y la Policía Fronteriza en los puentes”.
Si bien no reveló el tipo de vehículos y armamento que usarán para esta cobertura, en otros operativos se han desplegado caballos, cuatrimotos, camionetas, automóviles, avionetas, helicópteros y drones. En materia de equipo, contarán con armas cortas, largas y ametralladoras de diversos calibres, helicópteros y drones artillados. La tecnología usada es la misma que se emplea en operaciones de seguridad en Irak y Afganistán: sensores de movimiento, visores de detección térmica y nocturnos, cámaras infrarrojas y localizadores satelitales.
Puentes y peatones. “Lo difícil de los puentes es que no sabemos quién viene hasta que llegan”, dijo un agente de la garita.
En El Paso hay cuatro puentes de cruce binacional y, de acuerdo con cifras de aduanas estadounidenses, en días normales se contabilizan alrededor de 30 mil vehículos que cruzan hacia Texas y alrededor de 20 mil peatones. En días festivos la cifra se duplica a 60 mil automóviles y 40 mil personas.
Desde ayer hasta mañana, las autoridades fronterizas estadounidenses consideraron que la cifra se duplicaría. En un día normal el cruce en vehículo desde Ciudad Juárez a El Paso, Texas, puede tardar entre una y dos horas. Se espera que durante los días señalados, por la visita del Papa, el lapso para cruzar la línea fronteriza sea de entre cinco y siete horas.
“Estamos preparándonos con más personal de otros puentes y aeropuertos”, explicó Jáuregui.
