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El Congreso de la Unión no tendrá al papa Francisco como visitante distinguido.
Ésto, a pesar de que en un momento las cámaras de Diputados y de Senadores se pelearon la presencia del Pontífice en su respectivo salón de sesiones en cuanto se conoció su visita a México.
El presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Jesús Zambrano (PRD), informó que la notificación de que el papa Francisco no acudiría a una sesión solemne del Congreso de la Unión, llegó de la Secretaría de Relaciones Exteriores, y no por medio de la Nunciatura Apostólica.
“El argumento fue que no querían hacer acercamientos políticos. Finalmente se redujo a que habrá un encuentro como parte de una visita de Estado, a la que se invitará a los representantes de los Poderes del Estado. Se informó a través de la Cancillería, quienes fueron el contacto para el propósito”, aseveró Zambrano Grijalva.
Lamentó que no se haya concretado un acercamiento con el Pontífice, pues les hubiese gustado “que viniera para sostener un diálogo legislativo”, comentó el perredista.
Respetuosos de decisión. El coordinador de los diputados del PAN, Marko Cortés, aseguró que su partido será siempre muy respetuoso de la decisión del papa Francisco.
“Estaremos atentos y presentes en el lugar donde se defina el encuentro de legisladores con el jefe del Estado Vaticano y líder católico. Tras ser publicada su agenda, nos enteramos que no estaba considerada su visita a la Cámara de Diputados para Congreso General”, refirió.
Cortés Mendoza añadió que tanto la Cámara de Diputados como el Senado le extendieron una invitación con el interés de sostener un encuentro con su Santidad, a fin de que desde la tribuna más importante del país se envíe un mensaje de paz y armonía ante el contexto social, económico y político que vive México.
El vicecoordinador del grupo parlamentario del PRI, Jorge Carlos Ramírez Marín, detalló que es un hecho que el papa Francisco no visitará la Cámara de Diputados, toda vez que la Nunciatura Apostólica le expresó a Relaciones Exteriores que el Vaticano no desea dejar establecido como obligación, que cada vez que visite un país, asista a una sesión de sus congresos o cámaras.
“Ante ese argumento, nosotros le hicimos la invitación, está reiterada para cualquier momento, pero ante esta consideración nos allanamos. El argumento nos lo dieron en Relaciones Exteriores”, detalló.
Ramírez Marín comentó que como legisladores, estarán a la espera de que se puedan reunir con el Papa, “donde nos inviten”.
Senado, todavía con la esperanza. Aunque para senadores ya es un hecho que el papa Francisco no acudirá a la Cámara Alta, de manera oficial el Senado no ha recibido notificación sobre la invitación que hizo al nuncio apostólico en México, Christophe Pierre, para que el Pontífice ofrezca un mensaje ante ese órgano legislativo durante su visita a México.
El presidente del Senado, Roberto Gil (PAN) —quien en octubre pasado, entregó una invitación oficial— al nuncio apostólico para que asista a ese órgano legislativo, aseguró que no ha recibido respuesta formal.
“Se entiende que todavía se están haciendo ajustes a la agenda. No puedo dar por negada la visita, ni enterrado el asunto, porque la invitación sigue vigente. Es como el que invita uno a una boda, pero no ha confirmado, ojalá llegue”.
Sin politizar, ni sentar precedente. No obstante, los senadores Luis Sánchez Jiménez (PRD), vicepresidente de la Mesa y Gabriela Cuevas Barrón (PAN), presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores, dijeron que aunque no ha habido respuesta a la invitación, hace unos días que el nuncio apostólico declinó la invitación de los legisladores.
Ello, dijeron, porque las autoridades eclesiásticas no querían dejar el precedente de que el Santo Padre diera un mensaje en los congresos legislativos de los Estados que visita.
En septiembre pasado, el papa Francisco se convirtió en el primer Pontífice que habló ante una sesión conjunta de las cámaras del Congreso de Estados Unidos.
El 11 de enero, Christophe Pierre aseguró que la visita tiene carácter pastoral, no político; explicó que se rechazó la invitación porque no quiere crear un precedente respecto a su presencia en los congresos de países que visita y no es oportuno.
Cuevas Barrón dijo que no es un revés y al contrario, se puso en la mesa el acercamiento a un líder religioso: “Es la primera vez que sucede esto en el legis- lativo que siempre ha sido muy tímido de cualquier expresión religiosa, no obstante que somos un país donde predomina la religión católica, no hemos defendido el culto público a cualquier religión”.
