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Lesly Abril, de 12 años, tiene la oportunidad de una mejor calidad de vida en el Centro de Rehabilitación Infantil Teletón (CRIT), de Tijuana, que se considera el más moderno y completo en modelo de atención entre los 22 que operan en México, que inauguró el viernes el gobernador de Baja California, Francisco Vega de Lamadrid.
El gobierno de la entidad aportó el terreno en el que se desarrolló el proyecto a cargo del arquitecto Sordo Madaleno, que se concretó con 150 actividades para recaudar fondos.
Su capacidad es para mil niños y sus familias, para atender discapacidades de lesión cerebral leve, moderada y severa; lesión medular congénita adquirida; afecciones neuromusculares; amputaciones y enfermedades osteoarticulares; males congénitos genéticos y de alto riesgo neurológico.
Lesly será una de las beneficiadas. Tenía 8 años cuando fue víctima de la explosión de un restaurante de comida china en Tijuana en 2011; aquel domingo, caminaba junto con su tía por la avenida principal de la colonia El Florido, cuando la fuerza de la detonación provocada por una gran fuga de gas la arrojó hacia el otro lado de la calle.
La niña sufrió daño neurológico. Permaneció durante dos meses internada en terapia intensiva, en coma inducido, con severas lesiones en la cabeza y el rostro.
Alma, su madre, quien laboraba en una maquiladora, dejó su trabajo para atender a su hija. “En el CRIT Tijuana hemos contado con neurólogos, pediatras, terapeutas y es muy poco lo que se paga, se puede decir que es casi regalado, 5 pesos por terapias; 12 pesos por una consulta; un estudio de la vista o del oído lo pagamos en 14 pesos, cuando en otros lugares me costaban hasta 400 pesos.
“¿Se imagina lo que esto significa?, pues tuve que dejar de trabajar para estar con mi hija de tiempo completo”, dice.
Ella y su niña asistían al DIF, Clínica 1 de Tijuana, para que Lesly recibiera terapia física, “pero ahora el CRIT es un lugar más especializado, aquí la meten a las tinas multifuncionales con hidrojets para focalizar las áreas de tratamiento que necesita; ahora siento que ella está más alerta con el taller de adaptaciones tecnológicas, con la realidad virtual para el entrenamiento de los miembros superiores y equilibrio que está recibiendo; luces de colores, estimulación, siento que está más alerta, su mirada no está tan perdida como antes”.
Hasta hace poco, Alma necesitaba trasladarse a La Paz, Baja California Sur, para las revisiones más específicas que Lesly necesitaba, era un camino de 24 horas en carretera, “con lo que esto implica, pues hay que estarla moviendo de posición; cambiándole el pañal, se alimenta por botón gástrico y había que vigilarla muy de cerca para que no se fuera a ahogar. Ahora no tendremos que trasladarnos a La Paz, pues fuimos candidatas para estar en este lugar.
“Antes, durante un año tres meses, mi niña tenía una atención parcial, por todas las dificultades de traslado hacia el CRIT de La Paz, ahora con el CRIT Tijuana, ya en nuestra casa, tendrá una atención total”, afirma.
En estas instalaciones los pacientes tendrán acceso a un equipo robótico de entrenamiento en marcha (Lokomat) y a otro igual de miembro superior (Armeo); a un taller de adaptaciones tecnológicas para facilitar la inclusión; a la realidad virtual para entrenamiento de miembros superiores y equilibrio (Pablo); a un circuito para capacitación de diferentes etapas para la marcha (Tera) y las tinas multifuncionales con hidrojets para focalizar áreas de tratamiento.
“Ya no serán 24 horas de camino”
Claribel, mamá de Sofía, de 12 años, también tenía que ir al CRIT de La Paz, cuando menos una vez al mes para las terapias que su niña necesitaba: “Eran 24 horas de camino, yo vendo productos de belleza y plata; es poco lo que gano. Luego el carro se me descompuso y sólo la llevé un año al CRIT de La Paz. Ahora no tendremos que ir más. Yo no podía viajar más que en avión, pues Sofía no se sostiene sola, y no la puedo cargar todas esas largas horas de camino”.
El hecho que Sofía esté en el CRIT Tijuana significa “que ahora estaremos en casa; no vamos a viajar”, asegura. Cerca de su hogar hoy tiene el centro que cuenta con médicos, nutriólogos, terapeutas físicos, ocupacionales, de lenguaje, genetistas, laboratoristas; todos son profesionales de la salud.
Fernando Landeros, presidente de Fundación Teletón México, el sistema de rehabilitación infantil privado más grande del mundo que atiende diariamente a 33 mil niños, explica: “En este lugar en el que estamos en Tijuana sólo había polvo, no había nada en este terreno; creo que con el amor de todos hicimos algo que muchas veces parece impensable: llenar un vacío en un lugar de amor, equipado con la más avanzada tecnología, bajo el criterio de calidad médica y calidez humana; antes del CRIT Tijuana había una doble combinación, o los niños no se atendían o era un peregrinar por todas las instituciones locales y estatales sin encontrar lo que estaban buscando, esto ahora cambió radicalmente para los padres de familia”.
El juego como beneficio
En uno de los cuartos del CRIT, Tijuana, en el de asistencia tecnológica, está Elena Contreras con una hija que tiene hidrocefalia congénita. Ambas están con un médico terapeuta, quien muestra una pantalla con peces azules, y Karla Amairani, de 5 años, tiene que pescarlos uno a uno; es la primera vez que lo hace; se le ve animada. No se quiere ir. No quiere que se le fotografíe, pues puede perder a alguna de sus presas.
“Karla tiene mucha torpeza motriz, le cuesta mucho trabajo agarrar las cosas, sostenerlas, no tiene equilibrio, debe caminar con ayuda de andador, aquí ella cuenta con aparatos más avanzados, mucha tecnología, otros tipos de terapias, rehabilitación, tendrá a un paidosiquiatra, contaré con asistencia sicológica, pues los padres necesitamos apoyo para tratar de llevar una vida lo más normal posible ante discapacidades tan severas”, asegura Elena.
El doctor Rafael Victoria Cruz, especialista en medicina física y rehabilitación pediátrica, refiere que “lo que buscamos es proporcionar las herramientas electrónicas para facilitar su postura física, expresión corporal, socializar, para usar sus segmentos corporales con movimientos intencionales; buscamos que ellos hagan movimientos con un estímulo visual, táctil y auditivo, utilizando los medios electrónicos”, comenta uno de los 102 rehabilitadores con los que cuenta este lugar.
“Sé que Nicolás, con el CRIT, volverá a caminar”
María del Rosario González y su esposo, ambos abogados, tienen un hijo que nació prematuro: a los cinco meses de gestación. Nicolás permaneció entubado tres meses, tuvo hidrocefalia, neumonía y no camina.
“Estamos en el CRIT Tijuana, donde sé que recibirá las terapias adecuadas; las ha estado recibiendo pero a nivel privado. Él no hablaba, le hemos estado dando terapias por fuera; Nicolás va en segundo de kínder y va avanzando con sus movimientos de la mano. Le falta más potencia en las piernas, le acabamos de aplicar toxina botulímica en los músculos pues estaba muy contracturado”, señalan sus padres.
“Aquí en Tijuana no existía un centro así, los aparatos que tiene son algo fantástico. Realmente faltaba un Teletón, un CRIT, pues no encontramos terapistas buenos para Nicolás, hacía falta un lugar como este para que los niños no se contracturen, para que tengan más movimientos, ahora, aquí están los aparatos adecuados para tratarlos. Lo que le falta a Nicolás son terapias y aparatos como los que tiene el Teletón para que vuelva a caminar, como las terapias en el agua. Ahora tengo la seguridad de que volverá a caminar; estamos contentos, pues como padres debemos contribuir a la rehabilitación de nuestros hijos para que avancen”.