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Bruselas.— Como parte de una estrategia global para dar visibilidad a la violencia que enfrentan los defensores de derechos humanos en México, se inauguró en el Parlamento Europeo una muestra fotográfica dedicada a 40 de los más reconocidos activistas en el país.
“Son 40 historias de personas comunes que tienen como similitud el haber pasado de la condición de agredidos a protectores de las garantías individuales”, dice a EL UNIVERSAL el autor de la exposición, el fotógrafo argentino Fernando Cortiglia.
Con el título de Lo urgente, lo inhóspito y lo sublime, la obra expuesta en el segundo piso del edificio Paul Henri Spaak y patrocinada por la Comisión Europea, está compuesta por 40 retratos acompañados por impresiones fotográficas sobre pan de oro.
“Las personas miran a la cámara para simbolizar cómo es que ellos miran al mundo: de frente y con la cabeza en alto; y las impresiones de oro representan su valor y los riesgos que toman”.
Fernando Cortiglia explicó que los retratos “son de los activistas más importantes y relevantes en México”, y fueron elegidos por la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Humanos (CMDPDH), instancia responsable del proyecto y que opera con fondos europeos.
En el abanico de personalidades hay religiosos, abogados, feministas, ambientalistas, ingenieros de sistemas, hijos de víctimas de desapariciones forzadas, defensores del derecho infantil y luchadores sociales.
Están el padre Solalinde, defensor de los derechos de los migrantes; Mariano López, quien lucha por los recursos naturales del mar en el municipio de Juchitán, y María Elena Herrera, quien busca a cuatro hijos desaparecidos y creó una fundación de búsqueda de personas que lleva su nombre.
Juan Carlos Trujillo, hijo de María Helena, resaltó la importancia de la exposición: “Hay una criminalización de la labor del defensor, por lo que sólo uniendo fuerzas y dando a conocer nuestras desgracias podremos encontrar justicia”.
La muestra forma parte de la campaña “Haz que se vean” de la CMDPDH y es resultado de una visita de dos meses al país por parte del fotógrafo, quien entre sus encuentros destaca el mantenido con Alberto Donis Rodríguez, migrante guatemalteco y coordinador del albergue de migrantes Hermanos en el Camino, en Ixtepec, Oaxaca.
“Son historias conmovedoras de personas que sin ser superhéroes hacen un trabajo excepcional, pero el caso de Alberto me marcó, debido a que poco antes de nuestro encuentro estuvo expuesto a ser ejecutado por un sicario”.
Después de Bruselas, en donde fue inaugurada, la muestra viajará a Barcelona, ciudad de México y Portugal.