La Comisión interamericana de Derechos Humanos (CIDH) formuló 21 recomendaciones al Estado mexicano, entre ellas el retiro gradual de las Fuerzas Armadas de las tareas de seguridad.
“La actual crisis de graves violaciones de derechos humanos que atraviesa México, es una causa y consecuencia de la impunidad que persiste en la llamada guerra sucia y que ha propiciado su repetición hasta el día de hoy”, indica el documento.
La CIDH recomendó establecer un registro nacional de restos no identificados; maximizar los esfuerzos en la búsqueda de fosas clandestinas, fortalecer las instituciones forenses, elaborar un diagnóstico nacional sobre desplazamiento forzado.
Eliminar la figura del arraigo, crear un registro único nacional de personas detenidas, crear una institución nacional autónoma de servicios forenses, tomar medidas en casos de uso indebido de la fuerza, adoptar medidas de protección específicas de protección a familiares de víctimas que estén en peligro, revisar la ley general de víctimas, adoptar una ley sobre desaparición forzada y otra de tortura.
Establecer mecanismos de búsqueda inmediata de personas desaparecidas, lineamientos para la recopilación de estadísticas uniformes en graves violaciones a los derechos humanos, profundizar en los trabajos para la identificación de restos en las rutas de migrantes, corregís la excesiva aplicación de la prisión preventiva, contar con un plan sobre la cooperación entre las autoridades, investigar casos en los que los jueces no han ordenado una investigación cuando existen denuncias por tortura, rendir cuentas sobre las graves violaciones de derechos humanos y fortalecer los mecanismos de protección a defensores de derechos humanos y periodistas
Culmina visita
El Pleno de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) sostuvo un encuentro con la Secretaria de Relaciones Exteriores, Claudia Ruiz Massieu, donde se intercambiaron puntos de vista sobre el resultado de los trabajos de la visita que culminó hoy.
En un comunicado, la Cancillería informó que en la reunión también estuvieron presentes representantes de las Secretarías de Gobernación, Defensa Nacional y Marina, así como de la Procuraduría de General de la República.
La dependencia federal destacó que hubo un diálogo franco y abierto, y que la CIDH resaltó la apertura de las autoridades nacionales mexicanas para escucharlos y atender sus cuestionamientos e hizo observaciones sobre su visita al país.
“Ambas partes señalaron la existencia de avances en materia de derechos humanos en México y reconocieron áreas de oportunidad en la que la cooperación entre ambos será fundamental”, aseguró Cancillería.
En el encuentro, Claudia Ruiz Massieu subrayó la importancia de que México y la CIDH continúen trabajando conjuntamente para lograr la eficiencia real del Sistema Interamericano de Derechos Humanos y, en beneficio de las víctimas, continúen diseñando e implementando esquemas para atender los rezagos que encuentra el sistema de peticiones individuales.
Se detalló que durante cinco días, la CIDH desahogó una amplia agenda con autoridades federales y de los estados de Coahuila, Guerrero, Nuevo León, Tabasco y Veracruz, lo mismo que del Distrito Federal, así como con la Suprema Corte de Justicia de la Nación y el Congreso de la República.
En todos los encuentros, las autoridades competentes compartieron información sustancial sobre avances en materia de derechos humanos en el país. A su vez, la CIDH sostuvo reuniones privadas con organizaciones de la sociedad civil, convocadas para esos fines por la propia Comisión.