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Ante las lluvias de los últimos días, la Secretaría de Protección Civil exhortó a la población a extremar precauciones debido a que se pueden presentar afectaciones en caminos y carreteras, deslizamiento de laderas, desbordamiento de ríos y arroyos, inundaciones, así como saturación de drenajes.
Además, las precipitaciones han reblandecido el suelo en algunas regiones por lo que es importante alejarse de lugares donde se puedan producir deslaves.
En una infografía publicada en su cuenta @PcSegob, explicó que las montañas, las sierras y los cerros conforman 47 % del país, de las cuales 17% tienen mayor probabilidad de presentar inestabilidad de laderas.
La inestabilidad de las laderas se produce cuando se satura el suelo por lluvias intensas, fugas de agua, sismos, actividad volcánica, vibración de maquinaria, por el peso de muchas construcciones, deforestación, filtraciones de fosas sépticas o aguas domésticas y excavaciones inadecuadas.
En ese sentido, dio a conocer que antes que ocurra un deslizamiento se presentan hundimientos y agrietamientos en la parte media o alta de la ladera, levantamiento de pisos o deformaciones que dificultan el cierre de puertas y ventanas, rotura de pavimento, inclinación de árboles, deformaciones de muros y pequeños sismos.
Para disminuir el riesgo en esta época de lluvias, la población asentada en ese tipo de lugares debe revisar de manera constante puertas, muros, techos y pisos para detectar posibles agrietamientos, abultamientos o expansiones.
Asimismo, recomendó revisar las tuberías, así como la posición de los árboles, postes y en caso de observar alguna señal de inestabilidad avisar inmediatamente a las autoridades de protección civil en sus lugares de residencia.
En caso de tormentas eléctricas, sugirió a la población evitar los lugares altos como cerros o montañas, apartarse de postes eléctricos o antenas, bardas metálicas y no usar paraguas con punta metálica.
Asimismo, pidió a la población evitar permanecer en espacios grandes abiertos y el contacto con agua, y no refugiarse debajo de los árboles.
Explicó que las tormentas eléctricas son descargas violentas de electricidad atmosférica, que se manifiestan con rayos o chispas, emiten un resplandor breve o relámpago y un trueno; ocurren entre mayo y octubre y pueden durar hasta dos horas.
Esos fenómenos climáticos suelen acompañar a lluvias intensas, vientos fuertes, probabilidad de granizo, rayos, inundaciones repentinas e incluso tornados, ya que los rayos pueden causar parálisis, quemaduras, dolor de cabeza intenso, perdida de la memoria y audición e incluso la muerte.
JLCG
