Para atender uno de las aristas que padecen los niños migrantes, la senadora Gabriela Cuevas (PAN) pidió a actualizar el Memorándum de Entendimiento suscrito con Estados Unidos en materia educativa, pues los menores han estado expuestos a situaciones de riesgo en términos educativos, lo que incrementa sus probabilidades de deserción y reprobación escolar.
La también presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores adelantó que presentará un punto de acuerdo para exhortar al Ejecutivo federal a actualizar el Memorándum y para que en el Presupuesto de Egresos de la Federación 2016 se destinen recursos suficientes a la reinserción educativa de niñas, niños y adolescentes migrantes mexicanos o de origen estadounidense con padres o madres de nacionalidad mexicana.
Cuevas refirió que de acuerdo con el Censo de Población y Vivienda, entre 2005 y 2010 casi un millón de mexicanos regresaron de los Estados Unidos. Entre ellos se encontraban miles de niños que tuvieron que enfrentarse a un choque cultural. Algunos se reencontraron con sus raíces, pero otros, nacidos en Estados Unidos, se toparon con barreras hasta de idioma.
Explicó que en los últimos siete años el número de repatriaciones de niñas, niños y adolescentes migrantes de nacionalidad mexicana provenientes de Estados Unidos ascendió a 176 mil 144 entre el año 2007 y junio de 2014.
Mientras que en el año 2010 había 597 mil niños y niñas con ciudadanía estadounidense viviendo en México.
“Estos niños se convierten en un sector de la población expuesto a situaciones de riesgo en términos educativos, lo que incrementa sus probabilidades de deserción y reprobación escolar”, comentó Cuevas Barron.
Entre las dificultades que enfrentan los niños migrantes para acceder a la educación, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos ha señalado que se les exige que cuenten con documentación migratoria vigente y se les cobra derechos por validar sus estudios anteriores, requisitos que muchas familias no pueden cumplir por la situación de pobreza en la que viven.