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Los beneficiarios de la primera etapa de la Cruzada Nacional Contra el Hambre disminuyeron sus carencias en los servicios de salud y en la alimentación, dio a conocer el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).
Por lo que consideró que “la cruzada ha contribuido a reducir la brecha existente en los niveles de pobreza extrema entre la población que atiende”.
En el primer caso, la carencia por acceso a los servicios de salud pasó de 32.9%, en el periodo que va del año 2013-2014, a 9.2%, en 2015.
Mientras que en carencia por acceso a la alimentación pasó de 100% a 42.5%, de acuerdo con el Informe de Resultados Intermedios de la Cruzada Nacional Contra el Hambre.
El informe, que se presentó a través de un boletín, fue enviado a los medios una hora antes de la conferencia de prensa que encabezó la titular de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), Rosario Robles.
Para el Coneval, los resultados del estudio exploratorio del impacto de la cruzada son congruentes con la reducción en el porcentaje de población con carencias sociales.
A la luz de los resultados, el organismo que analiza la pobreza en México señaló que, si bien “estos avances son importantes, es indispensable preguntarse si es posible escalar a nivel nacional y con la misma intensidad los mecanismos de identificación de los hogares”.
En el Informe del Coneval se presentaron dos estudios: el primero es una Encuesta Panel aplicada a 207 mil 578 de hogares que fueron beneficiarios con la cruzada entre 2013-2014, los cuales fueron revisitados en 2015, por lo que fue posible analizar la evolución; el segundo estudio se elaboró para conocer la dinámica de los indicadores de pobreza de cinco municipios que fueron elegidos por el Coneval para analizar los resultados de la cruzada a medio trayecto.
Los municipios analizados fueron Zinacantán, Chiapas; Guachochi, Chihuahua; San Felipe del Progreso, Estado de México, Mártir de Cuilapan, Guerrero, y Tehuacán, Puebla.
Todos ellos, aclaró el organismo, forman parte de los 400 municipios seleccionados por la Sedesol para iniciar los trabajos de la cruzada a principios de 2013.
De acuerdo con estos resultados, el Coneval informó que se puede observar que los indicadores de carencia social son menores en 2015 respecto a la situación de estos beneficiarios en el periodo 2013-2014.
Destacan las disminuciones en las carencias por acceso a los servicios de salud y por acceso a la alimentación. En el primer caso, el indicador pasó de 32.9%, en 2013-2014, a 9.2%, en 2015. La carencia por acceso a la alimentación pasó de 100% a 42.5%.
La carencia por calidad y espacios en la vivienda pasó de 56.7% a 38.4%; por servicios básicos de la vivienda, de 57.0 a 42.9%; por acceso a la seguridad social, de 97.6 % a 87% y en rezago educativo, de 32.7% a. 25.6%.
