Para la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), el racismo, la discriminación y la intolerancia en nuestro país son una lamentable realidad que destruye vidas.
Por ello, dijo el Organismo federal es urgente y prioritario dar reconocimiento constitucional y legal a los derechos de los miles de mexicanos afrodescendientes, ya que desconocerlos es condenarlos a seguir en el olvido.
Para su combate, es necesario establecer acciones y políticas públicas que eliminen esa segregación en todas sus formas, afirmó Norma Inés Aguilar León, cuarta visitadora general de la CNDH, al clausurar, con la representación del Ombudsman nacional, el Foro Internacional “Discriminación Racial y Afrodescendientes en México”.
Ante expertos nacionales y extranjeros, así como representantes de diversos organismos del Estado y de la población afrodescendiente, afirmó que la Comisión Nacional lamenta cualquier acto de discriminación, por acción u omisión, y está en favor de la defensa integral de los derechos humanos de quienes se identifican como pueblos afromexicanos.
Explicó que el Organismo nacional trabaja con distintas instituciones para erradicar la discriminación en todas sus formas, no obstante reconoció que falta mucho camino por recorrer y es necesario unir esfuerzos para iniciar un nuevo ciclo en el que no exista discriminación, para el cual todos los servidores públicos deben promover y difundir el respeto a los pueblos afrodescendientes.