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doris.gomora@eluniversal.com.mx
Para el gobierno de Estados Unidos, los cárteles mexicanos son actualmente las organizaciones más peligrosas y sofisticadas que financian sus actividades en otros continentes con las ganancias que obtienen en territorio estadounidense, por lo que las detenciones de sus líderes en México son una advertencia de que ningún criminal es inmune de ser arrestado y procesado, señala información de la Agencia Antidrogas (DEA, por sus siglas en inglés).
Las alianzas que han logrado los cárteles mexicanos con pandillas estadounidenses les han generado ganancias por narcotráfico, con las cuales financian sus actividades ilegales en otros continentes, entre ellos Europa, Asia y África, agrega.
Al respecto, la agencia afirma que las organizaciones transnacionales mexicanas son actualmente las principales proveedoras de drogas como mariguana, cocaína, heroína y metanfetaminas en Estados Unidos, por lo que han aumentado sus alianzas con pandillas locales para operar.
De acuerdo con análisis realizados por la DEA, los cárteles del narcotráfico de México son las organizaciones más peligrosas que tienen sistemas altamente sofisticados de operaciones, y cuya violencia ha penetrado a la Unión Americana por la frontera que comparte con territorio mexicano.
Las alianzas que han establecido con pandillas locales, refiere, representan una amenaza creciente para los ciudadanos y las comunidades enteras de EU, especialmente porque han creado redes de distribución en barrios, ciudades y estados mediante células.
La DEA ha ubicado que las alianzas entre ambos grupos “son producto de la mutua necesidad debido a que las organizaciones mexicanas cuentan con la infraestructura para almacenar y posteriormente distribuir la droga a las células de narcomenudeo estadounidenses, las cuales tienen establecidas redes de entrega”.
Producto de su expansión en EU, agrega, los cárteles mexicanos así como sus socios locales han provocado un incremento en la violencia como resultado de atacar las casas de seguridad, bodegas y casas de grupos rivales en territorio estadounidense.
Mientras que la DEA combate sus principales corredores de abastecimiento, los cárteles mexicanos en alianza con otras organizaciones penetran a EU y Europa desde otros continentes, por lo que las detenciones de sus líderes debe continuar, apunta.