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La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) pidió a las autoridades intensificar las investigaciones que lleven a la verdad sobre el homicidio de Salvador Adame Prado, periodista privado de su libertad el 18 de mayo en Michoacán, encontrado calcinado este lunes en la zona de Tierra Caliente, con el que suman ocho comunicadores asesinados en este año.
La CNDH expresó su condolencias a familiares, amigos y colegas de comunicador y solicitó que las investigaciones sean documentadas para que el móvil corresponda con las evidencias y no quede a lugar a dudas y pidió evitar precipitaciones hasta que haya certeza de los hechos.
"Casos como el de Salvador Adame ponen en riesgo la libertad de expresión como bien indispensable de la democracia, por lo cual la sociedad en su conjunto debe rechazar la violencia y exigir que cesen los ataques a comunicadores", señaló la Comisión en un comunicado de prensa.
Destacó que con este homicidio son 128 comunicadores asesinados desde el año 2000, de los cuales ocho han ocurrido durante este año.
Además, se tiene el registro de 20 desapariciones de periodistas y 51 atentados a instalaciones de medios de comunicación.
El organismo destacó que no hay justificación para que se pretenda limitar el trabajo de los periodistas, quienes deben contar con todas las garantías que les permitan ejercer su profesión sin amenazas ni agresiones.
La evolución de los acontecimientos será observada por la CNDH, que subrayó su compromiso con el gremio periodístico para demandar a las autoridades de los tres órdenes de gobierno la creación de entornos seguros para que su labor informativa se desarrolle sin miedos, ataduras, amenazas y represalias.