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Los militares también lloran, lo hacen por cuatro de sus compañeros que perdieron la vida en el municipio de Quecholac por hombres del crimen organizado que se dedican al robo de hidrocarburos.
En el centro de la explanada del Sexto Regimiento de la 25 Zona Militar se encuentran los cuatro féretros con el rostro en fotografía de cada uno de los soldados.
Al homenaje de cuerpo presente asistieron esposas, madres, hijos de los dos policías militares y dos soldados de infantería. La mirada de ellos es fija al féretro.
Asistieron personal de tropa, oficiales, jefes y generales para expresar su total apoyo a los familiares y despedir a sus compañeros.
El general Juan Manuel Rico Gámez, comandante de la Sexta Región Militar y el gobernador de Puebla, Antonio Gali Fayad, montaron una guardia de honor donde posan los cuerpos de los caídos.
Los familiares miraron desde una carpa a sus héroes, uno de ellos apenas había comenzado su carrera dentro del Ejército. Siete meses de servir al país.
El general y el gobernador entregan a las familias la bandera y una carta de condolencias; la senadora Patricia Leal se acercó a una mujer, la que se nota más desconsolada. Un minuto de silencio, aplausos, así les dicen adiós.