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¿Cuántas veces no hemos escuchado sobre la delincuencia y la inseguridad? Es probable que hayamos vivido incluso de primera mano alguna situación de este tipo o conozcamos a alguien que ha sido víctima de un delito.
Desafortunadamente, las cifras de la inseguridad en el país confirman que el panorama no es alentador.
Enfocándonos en el robo de automóviles todo parecía ir por buen camino hasta hace algún tiempo. Los números sobre este delito en el país, salvo algunas excepciones como el Estado de México o Jalisco, venían presentando un decremento consistente desde noviembre de 2011.
Sin embargo, en 2016 se rompió esta tendencia optimista y benéfica para los automovilistas y para la sociedad en general.
Si hacemos un corte a febrero de 2017, los datos de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros nos reflejan que en los últimos 12 meses (AMIS) hubo un incremento de 18.6% de este delito a nivel nacional; es decir, fueron robados 74 mil 377 vehículos asegurados en ese lapso y, si se considera que sólo 29.6% de los coches que circulan en territorio nacional están asegurados, la cifra final es aún más alta.
Un caso particular que siguió una tendencia positiva y que hoy vuelve a caer es el de Nuevo León, estado que pasó de 12 mil 590 vehículos robados en 2011 a 2 mil coches sustraídos en 2014, pero que en este último año el delito incrementó 26%.
Otras entidades donde se aumentó la estadística fueron Jalisco en 33%, Ciudad de México en 16%, Sinaloa y Estado de México en 11%.
Una de las cosas que más alarman es que además del aumento en el robo de autos, 58% de los delitos de este tipo son cometidos con uso de violencia. Eso provoca una gran afectación en las personas que son víctimas, no sólo porque las despojan de su propiedad y sufrieron el riesgo que esto conlleva, sino por los efectos sicológicos y el daño emocional que provocan en ellas este tipo de actos.
Para estar alerta, cabe mencionar que más de 80% de los robos con violencia ocurre en nueve entidades: Estado de México, Ciudad de México, Jalisco, Sinaloa, Veracruz, Puebla, Tamaulipas, Michoacán y Nuevo León.
Es preocupante que en adición al hecho de que hay aumento de robo a nivel nacional y en algunos estados, se está registrando una reducción en los vehículos recuperados; es decir, un doble efecto negativo, con impacto en las aseguradoras, pero sobre todo en el patrimonio de las personas.
En estos 12 meses, 38% de los coches fueron encontrados; sin embargo, es necesario que el trabajo entre las instancias involucradas para ello se intensifique, sobre todo en algunos estados, ante el incremento del robo y la baja de 1% en la recuperación.
En AMIS fungimos como testigos sociales y como observadores del fenómeno, pero también, a través de la Oficina Coordinadora de Riesgos Asegurados (OCRA), tomamos acciones para eficientar la recuperación y para prevenir el delito.
OCRA juega un papel trascendental, ya que se encarga de recuperar vehículos asegurados robados a través de una labor de investigación, identificación y legalización, con esto último nos referimos a que verifica que el auto localizado es el vehículo reportado como robado. Pero sin duda este trabajo es una labor en conjunto con las autoridades.
A pesar de que los números han ido al alza tenemos la esperanza de que la cifra se estabilice; sin embargo, el fenómeno del robo de vehículos es un espejo claro del fenómeno delictivo, y hoy más que nunca consideramos que no se debe relajar ni dejar de tomar todas las medidas posibles para prevenirlo y combatirlo, ya que en muchas ocasiones estas unidades se utilizan para cometer otros delitos.
Director general de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS)
