Más Información
L os actos de corrupción, la falta de respuesta de las autoridades y la intimidación de la policía durante sus operativos han propiciado la desconfianza de los veracruzanos en el gobierno del estado.
Los principales delitos que se reportan son el robo a casa habitación, a mano armada, levantamiento de personas, venta de drogas, de música y películas piratas, secuestros, balaceras, prostitución, drogadicción y “personas acostumbradas a vivir en la ilegalidad”, señala la Secretaría de Gobernación (Segob).
De acuerdo con los diagnósticos realizados a través del Programa Nacional de Prevención de la Violencia y la Delincuencia (Pronapred), el sentimiento de desconfianza permea en Boca del Río, Xalapa y Veracruz.
La salida del ex gobernador Javier Duarte de Ochoa, acusado por la Procuraduría General de la República (PGR) de enriquecimiento ilícito y lavado de dinero, representó pérdidas millonarias para el estado, según el dictamen de la Cuenta Pública aprobado por el Congreso de Veracruz, en 2015, en el que se detalla que su administración generó un daño patrimonial de 16 mil 175 millones de pesos.
En total, 40 presidentes municipales de Veracruz señalaron que no les fueron entregados recursos federales por aproximadamente 3 mil 300 millones de pesos.
En Boca del Río, el diagnóstico 2016 —que analiza datos de 2015— detectó que los pobladores no confían en los policías debido a conductas intimidatorias y la corrupción.
“La gente no tiene confianza en ellos [los policías] porque no han sido atendidas sus quejas, llegan tarde al lugar de los hechos o no dan seguimiento a sus demandas”, explica.
En Boca del Río “los principales problemas de delincuencia son el robo a casa habitación, robo a mano armada, venta de droga, levantamiento de personas, venta de piratería y secuestros. También se han presentado en ocasiones balaceras”, detalló la Segob.
“Hay prostitución, drogadicción muy alta en jóvenes, pandillas, personas que están acostumbradas a vivir en la ilegalidad. Los habitantes quieren una policía más cotidiana y presente, que ellos conozcan y que no sientan que hasta los policías pueden agredirlos si realizan una denuncia. Es un sentimiento de inseguridad, desconfianza y desprotección”, indica el documento obtenido por EL UNIVERSAL.
Contrario a esto, los pobladores de ese municipio han manifestado mayor confianza en los soldados y en los elementos de la Marina.
Indica que “la falta de credibilidad en las autoridades, sobre todo en las de procuración de justicia, ha generado que los ciudadanos no confíen en la resolución de los problemas delictivos, mientras la falta de conocimiento sobre el sistema penal propicia la nula cultura de denuncia, lo que conlleva la dinámica delictiva”, agrega.
La población del municipio de Veracruz percibe mayor inseguridad en las calles, el transporte público y los parques recreativos aunado a que existe un alto índice de robo con y sin violencia y delitos sexuales.
En Xalapa los ciudadanos manifestaron desconfianza en las instituciones de seguridad e impartición de justicia, debido a que perciben altos índices de corrupción en ellas, además de que tienen temor constante a ser robados y golpeados, ya que los principales riesgos identificados en el municipio son el robo de vehículo, cristalazos y violaciones.
En este municipio la Segob detectó un deterioro en la infraestructura que afecta directamente a la población.
“Las situaciones que se presentan con mayor frecuencia y representan un impacto en la sociedad se encuentran relacionadas con la infraestructura, como alumbrado, carencia en el mantenimiento de espacios públicos, calles y pasillos peatonales sin pavimentar, entre otras”, indica el documento.
En ese municipio fueron detectadas 11 pandillas, seis de ellas con 21 integrantes menores de edad que “agreden a la comunidad y generan un ambiente de inseguridad”.
Las pandillas que operan en el norte de Xalapa se dedican al robo, a cometer asaltos; además, consumen y venden drogas, lo que dificulta su acercamiento a las actividades implementadas por el Pronapred en favor de la comunidad.
“La denuncia ciudadana es escasa debido a la falta de credibilidad en los programas que provienen del gobierno tanto municipal, estatal y federal”, detalla el documento.