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natalia.gomez@eluniversal.com.mx
Las agresión contra las mujeres periodistas se ha incrementado en el auge de la era digital, aseguró Frank La Rue, director general adjunto de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación la Ciencia y la Cultura (Unesco).
Luego de presentar el informe Cómo Desarrollar la Seguridad Digital para el Periodismo, expresó su preocupación por el fenómeno de acoso sexual contra mujeres, en general y contra periodistas.
El texto fue dado a conocer ayer en las oficinas de la ONU en su versión en español por La Rue, la representante de la Unesco en México, Nuria Sanz, y el embajador Joel Hernández, director general para la ONU de la Secretaría de Relaciones Exteriores. Ahí se describe cómo las mujeres periodistas a menudo reciben comentarios que se centran en la apariencia física más que en los logros profesionales.
Esto supone “una especie de clave visual que no puede realmente utilizarse de la misma forma para desestimar o menospreciar a un reportero varón”, afirmó una periodista.
El texto describe al menos 12 de las amenazas digitales que se presentan en el ejercicio periodístico y una serie de recomendaciones para evitar que estos profesionales sean atacados. La identificación de la problemática y las sugerencias se hicieron con base en entrevistas a más de 50 expertos, así como con la participación de 50 organizaciones no gubernamentales y 200 profesionales.
Según Irina Bokova, directora General de la UNESCO, las mujeres periodistas a veces son víctimas de un “doble ataque”, porque se convierten en objetivo tanto por su género como por su profesión.
Señaló que casi dos tercios de las periodistas encuestadas dijeron que habían sufrido actos de “intimidación, amenazas y abusos” en relación con su trabajo, y casi la mitad fue víctima de acoso sexual en sus empleos.
“Las periodistas sufren de asaltos sexuales y violaciones que pueden producirse en represalia por su labor durante eventos públicos”, indica el informe.
Una periodista entrevistada observó que su marido, un conocido reportero al igual que ella, recibe virulentos ataques en Twitter por sus opiniones, pero que los comentarios no son de carácter sexualmente violento, como sí lo son contra ella.
