Seguridad

Soldados de fuego que apagan incendios

42 Brigadistas mexicanos fueron a Canadá a salvar la vida de bosques

El brigadista Salomón Morales, nacido en Tlaxcala, asegura que a sus 10 días en Canadá fueron como 410 días-hombre (FRANCISCO RESÉNDIZ. EL UNIVERSAL)
15/07/2016 |01:18Francisco Reséndiz / Enviado |
Redacción El Universal
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francisco.resendiz@eluniversal.com.mx

Nanacapilca, Tlax.— Acaban de volver a México, lucharon hombro a hombro para salvar vidas y contener las llamas que habían convertido en un infierno amplias extensiones de bosques en Alberta, Canadá. Están orgullosos de haberse bautizado en fuego y ser parte de la “hermandad Prometeo”.

Son los 42 brigadistas mexicanos, provenientes de todo el país y que desde la Comisión Nacional Forestal combaten incendios forestales. Ayer, el presidente Enrique Peña Nieto los reconoció por su labor más allá de las fronteras, por apoyar en mayo y junio a los canadienses.

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Juan Ramón Cruz es de Mexicali y usa braquets. Es un hombre maduro, ingeniero forestal, de cabello corto, que se esconde bajo su casco. Fue el representante internacional de México, que se encargó de coordinar la misión que llevó a dos brigadas de la Conafor a Edmonton y a Winnipeg.

“Lo primero que pusimos en el equipaje fue la Bandera Nacional”, dice el combatiente, y afirma que los brigadistas fueron a demostrar a Canadá que están preparados como los mejores combatientes de incendios forestales del mundo, “estamos a la altura y lo demostramos”, advierte.

Subraya que con orgullo representaron a México. Dice que el 24 de mayo viajó al Centro Nacional de Canadá para coordinar las labores de los brigadistas mexicanos, que partieron de Zapopan, Jalisco, a Ontario el 4 de junio y regresaron a México el 21 de ese mes.

“El momento más difícil tal vez no fue el incendio, fue dejar a nuestras familias, porque sabemos de la peligrosidad de nuestra actividad, no sabemos si vamos a regresar, y para nosotros es el momento más difícil, a final de cuentas, el incendio, estamos acostumbrados a este trabajo”, suspira.

El líder brigadista reconoce el trato de los canadienses para la misión mexicana y espera compartir la experiencia con sus similares de países de Centro y Sudamérica.

“Es una hermandad a la que llamamos Prometeo quienes nos dedicamos al combate a los incendios, nos sentimos identificados, porque más que un empleo es una pasión”, detalla.

A unos pasos está Salomón Morales, es brigadista nacido en Tlaxcala. Es bajito, usa barba y lleva un paliacate rojo al cuello. No se quita el casco. “Los 42 que entran al incendio son los 42 que salen de ahí”. Bromea un poco: “Nos dijeron que había osos, pero gracias a Dios nunca vimos uno”. En 10 días de labor fueron 410 días-hombre.