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Las olas de violencia en el estado de Guerrero prevalecen en varias regiones: en 24 horas, seis personas fueron asesinadas en diferentes puntos de la entidad.
Informes de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) señalan que de dos impactos de bala calibre 38 súper, fue ejecutado la noche del viernes en el municipio de Pungarabato el profesor de Educación Física, José Luis Salgado Santos de 29 años de edad, originario de Ciudad Altamirano.
Salgado Santos es el quinto maestro que muere a manos de la delincuencia organizada en la región de Tierra Caliente y es el tercero del gremio, que pierde la vida durante la administración de Héctor Astudillo Flores, gobernador de Guerrero.
El pasado martes más de 300 docentes salieron a las calles para pedir un alto a la violencia contra el gremio. Recordaron que cinco de ellos fueron secuestrados en sus aulas en Santana del Águila, municipio de Ajuchitlán del Progreso, de los cuales cuatro fueron liberados y el director falleció.
En Iguala, dos mujeres y un hombre fueron asesinados a balazos alrededor de la 1:00 horas.
El homicidio ocurrió cerca del Periférico Sur, donde en septiembre de 2014 sicarios y policías municipales desaparecieron a 43 normalistas de Ayotzinapa, y mataron a seis.
El parte informativo indica que cuatro jóvenes, dos mujeres y dos hombres estaban afuera de una tienda de abarrotes cuando un par de sujetos a bordo de una motocicleta les disparó: tres murieron y uno resultó herido.
El informe de la Secretaría de Seguridad Pública detalla que en Ayutla, municipio de la Costa Chica, fue asesinado el gerente de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
De acuerdo con el reporte, la víctima se hallaba frente a un bar en la calle Abasolo, en la colonia San Felipe.
En Acapulco, la región donde más hechos violentos se registraron durante enero, —van cerca de 70 homicidios— un taxista fue ejecutado en la colonia Cuauhtémoc con arma de fuego calibre 9 milímetros.
A excepción de la Costa Chica, tanto en Acapulco e Iguala se implementan operativos coordinados policiacos entre la Federación y el estado para reducir los índices de violencia. Participa la Policía Federal, la Fuerza Estatal y el Ejército.
