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El grupo de reacción inmediata llamado Los Bélicos, que tenía el director de la policía municipal de Iguala, Francisco Salgado Valladares, y que eran integrantes de la organización Guerreros Unidos, sí participó en el ataque y desaparición de los normalistas de Ayotzinapa.
Ubicados por ir encapuchados y utilizar armas de grueso calibre, el grupo de élite de Salgado Valladares utilizó los días 26 y 27 de septiembre del año pasado las patrullas 024, 026 y 027, entre otras, para perseguir a los autobuses en los que viajaban los normalistas, cerrarles el paso, atacarlos y luego levantarlos.
Los Bélicos eran los encargados de controlar las entradas a Iguala y cuando veían vehículos sospechosos los detenían. Eran los que realizaban el trabajo sucio para el entonces presidente municipal, José Luis Abarca.
De acuerdo con el expediente de la PGR, al que tuvo acceso EL UNIVERSAL, el grupo de élite secuestraba y extorsionaba en Iguala. Se caracterizaban por la violencia ejercida.
Guerreros Unidos infiltró también Protección Civil, eran los halcones en la ciudad, como ocurrió la noche del 26 de septiembre; además de los civiles que andaban en motoneta para reportar cualquier situación o presencia de las Fuerzas Armadas.
David Cruz Hernández, de Protección Civil, declaró que el día del ataque a los normalistas de la Escuela Raúl Isidro Burgos, se encontraba en el partido de Iguala contra los Avispones en la Unidad Deportiva.
Al terminar el primer tiempo, David escuchó por el radio una “clave 200” (una balacera) y se salió del partido.
Pasaron las horas y recibió una llamada, era Gildardo López Astudillo El Gil, lugarteniente del líder de Guerreros Unidos, Sidronio Casarrubias, preguntándole quién le entregaría los “paquetes”, refiriéndose a los normalistas.
En los cuatro meses que llevaba como halcón, Cruz Hernández declaró que en ese tiempo todos los “paquetes” que eran entregados a Guerreros Unidos siempre eran llevados a Cocula, por órdenes del Chucky. “Eran levantados pero nunca se pedía rescate”, dijo.
La noche del 26 de septiembre, las siete patrullas —027, 024, 026, 021, 012, 018 y 020— se encontraban en la zona de Periférico, al cruce con Juan N. Álvarez. Eran Los Bélicos atacando a los normalistas. Según la investigación de la PGR, los jóvenes estudiantes fueron confundidos como integrantes de Los Rojos, el grupo que disputa la plaza a Guerreros Unidos.
