politica@eluniversal.com.mx
Los restos de los ocho mexicanos que perdieron la vida en Egipto el pasado 13 de septiembre, tras un ataque de las fuerzas de seguridad locales, llegaron ayer al Distrito Federal; tras su arribo, los cuerpos fueron trasladados a la Coordinación General de Servicios Periciales de la Procuraduría General de la República (PGR).
Alrededor de las 7 de la noche, el vuelo 685 de la aerolínea KLM, aterrizó en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), en el que en contenedores especiales se trasladaron los restos de los connacionales que fallecieron hace más de una semana, luego de que el convoy de turistas en el que viajaban fuera atacado en el desierto egipcio, durante una excursión que realizaban.
En un comunicado conjunto, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) y la Procuraduría General de la República (PGR) informaron que los cuerpos fueron trasladados a la Coordinación General de Servicios Periciales, “donde les serán practicados los estudios correspondientes antes de ser entregados a sus familiares”.
Fuentes de la PGR consultadas por EL UNIVERSAL sobre las diligencias que se efectuarán, detallaron que a los cuerpos de las víctimas se les realizará una autopsia, con previa autorización de los familiares.
Ambas dependencias señalaron que el proceso de repatriación fue coordinado por personal de Protección de la SRE y con el apoyo de la embajada mexicana en El Cairo.
Los restos fueron embarcados en un avión, luego de que finalizaran las necropsias a los cadáveres y los trámites para su repatriación. La aeronave partió a las 4:00 horas, tiempo local, del Aeropuerto Internacional de El Cairo e hizo una escala en Ámsterdam, antes de dirigirse a México.
A nueve días del ataque los mexicanos que perdieron la vida en Egipto fueron identificados oficialmente como: Enriqueta Rojas Tacalco, Vanessa Ramírez Letechipia, Lilia Gabriela Chávez, Israel González Delgadillo, Rafael Bejarano Rangel, María Elena Cruz Muñoz, Luis Barajas Fernández y María de Lourdes Fernández Rubio.
El pasado viernes arribaron en el avión presidencial los seis mexicanos que salvaron la vida tras las acciones de las fuerzas de seguridad egipcias, quienes fueron trasladados al Instituto Nacional de Rehabilitación (INR) para continuar con su recuperación.
Luego del ataque, que el gobierno mexicano calificó de “inédito”, se elevó el nivel de alerta de viaje para Egipto, al recomendar a los connacionales que reconsideren o pospongan sus planes para ir a ese país “debido a la inestabilidad política y social, así como por la amenaza de ataques terroristas, o por la acción de las fuerzas armadas para enfrentarla”. El gobierno de México exigió en tres notas diplomáticas una investigación exhaustiva, y que se indemnice a las víctimas .