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Los regalos no solicitados que reciban los servidores públicos deberán entregarse al Servicio de Administración y Enajenación de Bienes (SAE), para que éste los ponga a la venta, los done o destruya, según ordenó la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
A través de un aviso emitido por la dependencia federal y dirigido a los servidores que forman parte de la administración pública federal, se les recuerda lo que establece el artículo 40 de la Ley General de Responsabilidades Administrativas para que tomen sus providencias con la entrada en vigor del nuevo Sistema Nacional Anticorrupción (SNA):
“En caso de que los servidores públicos, sin haberlo solicitado, reciban de un particular de manera gratuita la transmisión de la propiedad o el ofrecimiento para el uso de cualquier bien, con motivo del ejercicio de sus funciones deberán informarlo inmediatamente a las secretarías o al Órgano Interno de Control. En el caso de recepción de bienes, los servidores públicos procederán a poner los mismos a disposición de las autoridades competentes en materia de administración y enajenación de bienes públicos”, especifica.
De esta manera, la secretaría dispuso que los obsequios se canalizarán al SAE; es decir, al organismo descentralizado con personalidad jurídica y patrimonio propios, coordinado por la Hacienda federal y que se encarga de darle destino a los bienes y a las empresas improductivas para el Estado, a través de subastas periódicas públicas en las que puede participar cualquier persona.
Para darle formalidad al proceso de entrega de regalos, la SHCP diseñó un formato que deberán llenar con sus datos como nombre y cargo, correo electrónico, número de teléfono, la empresa que le dio el obsequio y descripción del mismo.
Además, la dependencia federal emitió un instructivo de llenado que incluye una lista de las 10 cosas que no recibirá el SAE como billetes, monedas, divisas, metales preciosos, bienes numismáticos y de filatelia, bienes con valor artístico o histórico, armas de fuego, municiones o explosivos, narcóticos, flora y fauna protegidos, materiales peligrosos y demás que sean prohibidos, restringidos o regulados.
