Más Información
Buque Escuela Velero “Cuauhtémoc” gana el premio Boston Teapot Trophy 2024; recorrió 1,170.78 millas náuticas en 124 horas
PRI exige que relación bilateral sea con dignidad y diálogo; “que EU y Canadá desconfíen de México es culpa de Morena”, acusan
GN y Ejército mantienen operativo para limitar operaciones de Los Viagras y CJNG; extorsionan a productores de limón en Michoacán
México podría cambiar de socio comercial ante amenazas de Trump; “China es una potencia económica”, dice senador
Avanza en comisiones del Senado integración de delitos con prisión oficiosa; extorsión y producción de drogas, son algunos
pedrovillaycana@eluniversal.com.mx
Los cambios hechos en la nueva política nacional de vivienda han permitido que los mexicanos de menores ingresos tengan acceso a una casa digna, cercana a los servicios públicos, fuentes de trabajo y redes de transporte, aseguró Rosario Robles Berlanga, titular de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu).
La funcionaria consideró que a partir de la presente administración, los subsidios que otorga el Estado mexicano para la construcción de vivienda se destina, indicó, tanto a desarrollos dentro de los perímetros de contención urbana, como a la población que percibe entre uno y 2.6 salarios mínimos.
Robles Berlanga dijo que uno de los principales cambios de la política de vivienda es que el Estado mexicano recuperó su papel como rector del desarrollo de las ciudades mexicanas y no deja esa responsabilidad a las empresas privadas.
La política nacional de vivienda es un modelo enfocado a promover el desarrollo ordenado y sustentable del sector, a mejorar y regularizar los hogares urbanos, así como construir y mejorar los rurales.
Al presentar en febrero de 2013 esta estrategia, se enfocó en lograr una mayor y mejor coordinación interinstitucional, a transitar hacia un modelo de desarrollo urbano sustentable, así como a reducir de manera responsable el rezago de vivienda y procurar una casa digna para los mexicanos.
La secretaria Robles Berlanga señaló que esta política de vivienda también permitió la creación de la propia Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano como cabeza del sector y como el ente que delimita los esfuerzos a los que deben sujetarse estados y municipios, que son los encargados de ejecutar los planes de desarrollo urbano.
Explicó que gracias a la aprobación de la nueva Ley General de Asentamientos Humanos, Ordenamiento Territorial y Desarrollo Urbano se han logrado definir claramente los lugares en los cuales no es posible construir vivienda, toda vez que representan un riesgo tanto para las familias mexicanas como para su patrimonio.
“Gracias a esta nueva política nacional de vivienda, luego de vivir años de enorme dificultad, hoy la vivienda es un sector vigoroso que mantiene más de 3 millones de empleos y que genera una derrama económica estimada por las empresas privadas en 450 mil millones de pesos”, comentó.