Señor director:
Me permito hacer referencia al artículo suscrito el día de ayer por Enrique Cárdenas Sánchez, Amenazas sicilianas en México, en el cual expresa puntos de vista sobre la violencia ejercida contra periodistas, acciones cuya condena enérgica comparto plenamente.
En el colofón del octavo párrafo del citado artículo, el señor Cárdenas alude a una conversación que sostuvimos el pasado 12 de mayo, señalando que le solicité “dejar de hablar sobre la gestión de Rafael Moreno Valle y el endeudamiento que dejó en el estado”, asunto que no sólo queda fuera del contexto y fondo del artículo en cuestión, sino que insinúa tendenciosamente una presunta advertencia.
Niego rotundamente haberle transmitido mensaje alguno al señor Cárdenas, y menos aún haberle solicitado dejar de hablar del tema mencionado.
Lamento que un académico de la estatura de Enrique Cárdenas, a quien conozco desde nuestras épocas de estudiantes en el ITAM, haya desvirtuado el contexto de nuestra conversación que incluyó asuntos sobre sus últimos trabajos académicos, sobre la deuda, así como la vida política en Puebla; diálogo que siempre se desarrolló en un ambiente de cordialidad y respeto mutuo.
Como es bien conocido en el medio gubernamental y político, quien suscribe la presente no suele —ni lo ha hecho jamás— proferir advertencias o amenazas en ningún sentido, respetando siempre opiniones ajenas aún con divergencia de criterios. A lo largo de mi vida como servidor público he alternando con profesionales de los medios, formadores de opinión, reporteros y comunicadores en general, que sin duda conocen mi trayectoria de respeto a expresiones de toda índole, apegándome siempre al marco de las leyes y de la ética que de los funcionarios se demanda.
Señor director, mucho le agradeceré publicar la presente misiva en el prestigiado diario que usted atinadamente dirige, con fundamento en lo establecido por la Ley Reglamentaria del artículo 6, párrafo Primero de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, en Materia del Derecho de Réplica.
Atentamente
Diódoro Carrasco Altamirano
Secretario general de Gobierno del Estado de Puebla
Respuesta del articulista
Estimado señor director:
En respuesta a la carta del secretario Diódoro Carrasco sobre nuestra conversación del pasado 12 de mayo, me permito señalar que efectivamente la reunión de aproximadamente una hora giró en torno a los temas por él mencionados, de forma cordial, con un contenido pesado. Respecto de ella, deseo precisar lo siguiente:
1. Me preguntó si tenía alguna aspiración política a la gubernatura y algún asunto con el ex gobernador Rafael Moreno Valle, a lo que contesté que no, que nuestra discusión sobre el tema de la deuda estatal era de todo el país, pero que habíamos prestado especial atención al caso de Puebla por nuestra evaluación de su Legislatura. Que los datos de la enorme deuda poblana eran correctos y que su forma de contratación y uso eran contrarios a las sentencias emitidas por la Suprema Corte de Justicia.
2. Después de mencionar que él era una persona de diálogo, mientras que otros en el gobierno eran mucho más rudos, me relató el episodio del ex presidente municipal Eduardo Rivera que, al no acatar ciertas condiciones, culminó en su inhabilitación para contender por la gubernatura de Puebla en 2018.
3. Fue entonces que me comentó que la definición de las candidaturas presidenciales para las elecciones de 2018 estaban muy próximas y me solicitó que ya no siguiera hablando sobre la gestión de Moreno Valle y el problema de la deuda. Que no me metiera en problemas, que no tenía sentido seguir con eso. Y remató ofreciéndome su ayuda si decidía buscar un cargo público.
Sé que no tengo manera de probar lo que señalo, pues no grabé la conversación. Incluso me recogieron mi celular a la entrada a la reunión. Sólo me parece que el asedio a las organizaciones civiles y a algunos de sus miembros por diversas autoridades han sido constante en los últimos meses, y yo soy simplemente uno más de mis colegas que lo ha sufrido. Y no me parece ni por mí, ni por nuestro país.
Atentamente
Enrique Cárdenas Sánchez
Centro de Estudios Espinosa Yglesias, A.C.
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